Si estás pensando que viajar a Tenerife con un bebé o un niño se va a limitar a ver sólo playas estás muy equivocado. Ir a Tenerife con un niño pequeño es un buen comienzo para ir tanteando cómo se da viajar con él o ella. Allí podrás visitar pueblos con encanto, parques naturales para hacer senderismo y, por supuesto, playas para descansar. Si quieres saber qué hacer y ver en Tenerife con un bebé no te pierdas estas recomendaciones.
Puerto de la Cruz
Aparte de ser una buena base para moverse por el norte de Tenerife, Puerto de la Cruz es una ciudad preciosa de la que podrás disfrutar con un bebe o un niño pequeño. Se recorre fácilmente a pie, a pesar de sus cuestas, y tiene diferentes planes para los más pequeños de la casa.
Visitar el paseo marítimo, con sus piscinas naturales, el Lago Martiánez, el jardín botánico o el barrio de la Fabriquilla, con sus casas coloridas y graffitis, son actividades que a los niños les encantará realizar. Pero si hay un lugar que a los niños les emocionará es el Loro Parque, y es que no todos los días se asiste al que es considerado el mejor zoológico del mundo, puedes conseguir tus entradas más baratas aquí.
Parque Rural de Anaga
Si queréis sorprender a los niños con rutas y paseos por paisajes de ensueño no debéis dejar de ir al Parque Rural de Anaga. Además, es considerado como reserva de la biosfera. Aquí la laurisilva campa a sus anchas y recrea escenarios sacados de películas fantásticas, en donde podrían habitar desde hadas hasta un centauro.
Existen rutas sencillas para hacer tanto con bebés, porteándolos en mochila, como para niños pequeños. Una buena ruta es el Bosque de los Enigmas que consta de 5 kilómetros y es circular. Tardarás como dos horas en recorrerla tranquilamente si sigues sus indicaciones (te aconsejo que empieces por el punto 6 del mapa). Dos consejos: lleva prendas de abrigo y comida para el camino.
También puedes contratar un guía para esta ruta que, además, os irá contando todas las curiosidades del bosque. ¡Ah! Un punto muy fotogénico del parque es el camino viejo al Mirador del Inglés, a unos 2 kilómetros del centro de visitantes y el parking.
El Teide
No podría faltar una visita al volcán más famoso de España en qué ver en Tenerife con un bebé o niño. En el Parque Nacional del Teide hay muchas actividades que hacer con niños. La principal atracción, subir al Teide, solo pueden realizarla los niños mayores de 3 años. Antes de esa edad no son admitidos en el teleférico que lleva a lo más alto y las rutas a pie que existen son demasiado duras para portear o ir caminando por su propio pie. Se suelen acabar rápido las entradas, por lo que es mejor que reserves tus entradas cuanto antes y no te quedes sin subir al Teide.
Algunas de las cosas que puedes hacer con bebés o niños en el Parque Nacional del Teide, más allá de subir a la cumbre, es hacer una ruta corta por Las Minas de San José, donde sentiréis que estáis en el planeta Marte, con senderos y explanadas llena de rocas volcánicas; un free tour para conocer la flora y fauna que habita este parque o pasear por las figuras rocosas más caprichosas del parque, los Roques García.
Además, podéis llevaros un billete de mil pesetas y que identifiquen qué roca aparece en él. Ambas opciones son rutas cortas, llanas y aptas para ir con bebés o con niños pequeños, incluso, hay tramos que con carrito.
Los pueblos del norte
Otra actividad para hacer por el norte de Tenerife con niños o bebés es visitar los pueblos tan pintorescos que hay en esta zona. A diferencia del sur de la isla que son muy turísticos y ‘artificiales’, en el norte se encuentran localidades con cientos de años y mucha historia.
Por ejemplo, Garachico, considerado uno de los pueblos más bonitos de España, o Icod de los vinos con el drago milenario, un “árbol” de más de 3000 años de edad, puedes comprar tu entrada aquí. La Orotava con los jardines del Liceo Taoro o visitar una plantación de plátanos también son buenos planes para realizar con niños. Una localidad que encantará a los más pequeños de la casa es Bocacangrejo, un pequeño pueblo pesquero al sur de la capital lleno de colores y corazones gracias al trabajo de un vecino, no querrán irse de allí.
Por último, otra localidad que les gustará es San Cristóbal de La Laguna. Una localidad considerada Patrimonio de la Humanidad. Sus calles repletas de colorido hacen que quieras recorrerla a pie y torcer en cada esquina. No puedes perderte su oficina de turismo, te sorprenderá su patio interior, o la iglesia y ex convento de San Agustín.
Santa Cruz de Tenerife
Ya sea con un freetour o por tu cuenta, en tu viaje a Tenerife con un bebé o niño no puede faltar qué ver en la capital de la isla. Pasear por la Plaza de España y contemplar el mar con la montaña de fondo, comprar en el Mercado Nuestra Señora de África, uno de los más bonitos de España, pasear desde la Plaza de la Candelaria por la Calle del Castillo y ver los edificios coloridos y antiguos o acabar con un baño en la playa de las Teresitas. Otras opciones que les gustarán a los pequeños serán entrar al Palmetum, recorrer el Parque Marítimo de César Manrique, justo al lado, o ver la forma tan peculiar que tiene el Auditorio de Tenerife Adán Martín, podéis jugar a las diferencias que existen entre este auditorio y la Ópera de Sydney.
¿Estás pensando en visitar Ibiza en 2023? A continuación te presentaremos 4 planes para que puedas disfrutar durante tu estancia en Ibiza. Desde disfrutar de las playas más hermosas de la isla, hasta conocer su rica historia y cultura, pasando por disfrutar de la vibrante vida nocturna de Ibiza.
Disfruta de las playas de Ibiza
Con sus aguas cristalinas y arena dorada, las playas de Ibiza son el lugar perfecto para relajarse y disfrutar del buen tiempo.
Las playas de Talamanca, Salinas y Cala d’Hort son algunas de las más famosas y concurridas de Ibiza. La playa de Talamanca se encuentra cerca de la ciudad de Ibiza y es ideal para pasar el día tomando el sol y disfrutando de las vistas de la ciudad.
La playa de Salinas es una de las más populares entre los turistas, y cuenta con un ambiente muy animado durante el verano. Por último, Cala d’Hort es una playa más tranquila y salvaje, perfecta para disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad.
Navega en catamarán por Ibiza y Formentera
Navegar en catamarán por Ibiza y Formentera es una actividad muy divertida y relajante que te permitirá disfrutar de las bellezas naturales de estas islas desde un punto de vista único. Hay muchas rutas diferentes que puedes elegir para tu paseo en catamarán por Ibiza y Formentera, dependiendo de tus intereses y del tiempo que tengas disponible. Algunas opciones populares incluyen la ruta del litoral norte de Ibiza, que te llevará a algunas de las playas más hermosas de la isla, o la ruta de Formentera, que te llevará a algunas de las playas más tranquillas y salvajes de esta pequeña isla.
Entre todas las opciones disponibles, recomendamos alquilar el catamarán a esta empresa; nosotros quedamos encantados con su servicio y su profesionalidad.
Visita el casco histórico de Ibiza
Con su laberinto de callejuelas estrechas y edificios históricos, el casco histórico de Ibiza es un lugar único y muy atractivo para los turistas.
Una de las joyas del casco histórico de Ibiza es el Dalt Vila, la ciudad amurallada de Ibiza. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el Dalt Vila es un lugar imprescindible que debes visitar durante tu estancia en Ibiza. Aquí encontrarás una amplia variedad de edificios históricos y monumentos. Entre ellos, destacan la Catedral de Ibiza, el Castillo de Ibiza o el Convento de Santo Domingo. Además, podrás disfrutar de unas vistas impresionantes desde las murallas de la ciudad.
Disfruta de la vida nocturna de Ibiza
Ibiza es un lugar famoso en todo el mundo por su vibrante vida nocturna y sus fiestas y discotecas. Si buscas disfrutar de la mejor música y fiesta durante tus vacaciones, Ibiza es el lugar perfecto para ti.
En Ibiza encontrarás algunas de las discotecas más famosas del mundo, como Pacha, Amnesia y Ushuaïa. Estas discotecas son verdaderos templos de la música y la fiesta, y cuentan con los mejores DJ’s y artistas del mundo.
Además de las discotecas, en Ibiza también encontrarás una gran cantidad de bares y clubs donde podrás disfrutar de la música en vivo y de la mejor fiesta de la isla. Durante el verano, Ibiza se convierte en un lugar muy animado y lleno de vida, y es el lugar perfecto para disfrutar de la noche y conocer gente nueva. Incluso puedes celebrar una fiesta en un barco con el atardecer de fondo.
Si has decidido viajar a las Islas Baleares ¡te doy la enhorabuena! Es un destino que lo tiene todo: sol, playa, historia, cultura, aventura, gastronomía, etc. Las Islas Baleares incluyen varios viajes tan diferentes como tipos de viajeros existen. Si te pones a preparar tu viaje te asaltarán un montón de preguntas para sacar el máximo partido a tus vacaciones, ¿quieres algunos consejos? Sigue leyendo y te ayudamos a viajar a las Islas Baleares.
El ferry la mejor forma de llegar a Baleares
Si tu intención es recorrer alguna de la isla que decidas, vas a tener que necesitar un coche o caravana y una forma de ahorrar es trayéndote tu propio vehículo. Si decides esta forma de viajar, la mejor forma de llegar a Baleares es el ferry. Hay diferentes trayectos desde la península, puedes ir en el ferry Barcelona-Ibiza, Denia-Mallorca, etc.
Una isla, unas vacaciones
La preciosa Catedral de Palma de Mallorca
Con Baleares, el que mucho abarca poco aprieta, y es que cada isla daría para varios viajes, especialmente, Mallorca. Pregúntate qué quieres en tus vacaciones: ¿fiesta? ¿naturaleza? ¿sol y playa? ¿tranquilidad? y en función de tus metas escoge una isla.
Por ejemplo, para fiestas Ibiza o Mallorca son las mejores, Formentera te dará la tranquilidad que necesitas y para disfrutar en barco de las mejores calas y playas las encontrarás en Menorca. ¡Ojo! que todas tienen de todo si sabes buscarlo.
Si lo tienes claro, ¡reserva ya!
Eso es, si ya te has decidido no pierdas el tiempo. Es un destino tan cotizado que los transportes y los alojamientos vuelan, especialmente en verano y Navidad. Menorca y Formentera, al ser más pequeñas, las opciones de dormir se reducen, por lo que se acaban enseguida.
Por otro lado, en Ibiza si coincide con la apertura o cierre de discotecas, la isla sufre una revolución y se agotan las opciones casi de un año para otro. Esto, por ejemplo, no ocurre en Mallorca, aunque existen casas y hoteles muy peculiares que son las primeras opciones en agotarse.
Investiga la zona donde te alojas
Pues sí, es uno de los mejores consejos para viajar a las islas Baleares, porque como te venimos diciendo, cada isla tiene mil caras, y de todos es bien conocido que hay mucho turista extranjero en Baleares. Investiga si en esa zona hay colonias de extranjeros o es de gente local o nacional, ¿por qué? porque si es zona de turistas europeos puede que los locales y negocios tengan los horarios adaptados a ellos y, a no ser que quieras comer a las 12 de la mañana y cenar a las 6 de la tarde, te será difícil encontrar locales con los horarios españoles.
Planing de las cosas qué hacer
Las ruinas talayóticas
Hay tantos planes que hacer en cada isla que deberás dejar fuera de tu viaje muchos lugares y actividades (siempre nos quedará la siguiente parada). Especialmente en Mallorca y Menorca hay muchas alternativas de turismo y te será muy difícil escoger entre todas las opciones o zonas que descubrir, por eso, hazte un planning de las cosas más importantes que quieres ver. De lo contrario, te estresarás en tus vacaciones por querer ver más de lo que puedes.
Lo más famoso de la Costa Brava son sus playas, reconocidas a nivel mundial, algunas de ellas son catalogadas las mejores de España. Pero ahora que el frío comienza hacerse presente también hay alternativas de turismo por el interior de esta zona. Si quieres disfrutar de las casas rurales en Cataluña, coge el coche y márcate una ruta de dos días por la Costa Brava, ¿no sabes por dónde empezar? Pues aquí tienes una ruta muy completa, ¿te vienes de viaje al medievo?
Dónde dormir
Alejándote de la costa y de la masificación de las playas puedes encontrar alojamientos muy bonitos y pintorescos. Además, en verano una buena opción son las casas rurales con piscina privada, en ellas podrás disfrutar, de día, descubriendo la zona y, de noche, con un baño relajante a la luz de la luna y sin nadie que te moleste.
Ruta de dos días por el interior de la Costa Brava
Día 1: Adentrándote en el medievo
Comenzamos por la capital, Geron. Si te gusta la famosa serie Juego de tronos, puedes buscar los escenarios donde se grabaron escenas de la serie. Aquí podemos pasar una mañana visitando el río Onyar y sus casas de colores, por donde nos adentraremos al casco antiguo, en donde visitaremos el Call, el barrio judío, la Catedral, las murallas y la rambla de la Libertad.
Río Onyar
Pasaremos la tarde en San Pau para pasear por sus calles empedradas hasta su Castillo y la Iglesia de Santa María y terminaremos nuestro primer día en Castellfollit de la Roca. Este pueblo está situado en lo más alto del río Fluvia, desde donde se tienen unas vistas impresionantes de La Garrotxa.
Haremos noche en Besalú para recorrerlo a primera hora del segundo día.
Día 2: De norte a sur
Este día promete ser intenso. Lo primero que visitaremos será Besalú, uno de los pueblos más bonitos de España, y mejor conservados, que data del s.X. En Besalú no debe faltar la foto de postal desde su puente romano. Además, en este pueblo se rodaron películas tan famosas como El Perfume o series como Westworld. Su judería está muy bien conservada y forma parte de la red de juderías de España como la de Cáceres o Granada.
Besalú
Después cogeremos el coche para ir al sur a ver el pueblo de 8 apellidos catalanes, pero antes pararemos en Madremanya, una joya escondida entre tanto pueblo medieval. Es chiquitito pero tan bonito como Besalú o Monells, nuestra siguiente parada. Aquí se rodó la famosa película de Emilio Martínez-Lázaro, pero más allá de su Plaza Jaume I, recorrer este pueblo rodeado de flores y naturaleza es un espectáculo visual que no debes perderte en tu ruta por la Costa Brava.
Terminaremos nuestro segundo día en el pueblo de Peratallada, un pueblo pequeñito pero lleno de rincones muy pintorescos en los que querrás hacerte fotos por doquier. Si aún te queda tiempo este segundo día, aprovecha y visita también el pueblo de Pals, otro de los pueblos más bonitos de Girona. Aquí debes recorrer las murallas, el mirador de Josep Pla y la iglesia y la plaza mayor.
La parroquia de Ordino situada al norte de Andorra, limitando con Francia, es el refugio de los que buscan naturaleza en estado puro, aventura, esquiar y cultura. Hay tanto que ver y hacer en Ordino que esta localidad se transforma según la estación del año. Durante el invierno ofrece actividades deportivas en torno a la nieve y en verano es un destino ideal para familias que quieran vivir la naturaleza desde dentro.
¿Quiere conocer todo lo que la parroquia de Ordino tiene preparado para ti? Pues sigue leyendo y querrás ir ¡ya!
Dónde alojarte
La mejor opción para dormir en la parroquia es alquilar una casa en Ordino. Desde aquí podrás recorrer la parroquia pasando por las diferentes zonas y pueblos de alrededor, ya que aquí se concentra la mayoría de alojamientos y comercios de la zona.
Hay varios apartamentos en Ordinoque seguro se adecuan a tus necesidades. Todos ellos supervisados y con la limpieza incluida en el alquiler. Un piso de alquiler te dará la libertad necesaria para disfrutar de tu viaje en esta comarca.
Qué ver en Ordino
Las calles de Ordino
Lo más interesante que tiene que ver la parroquia de Ordino son sus pueblos: El Serrat, Ordino, Llorts, La Cortinada, Arans, Ansalonga, Sornàs y Segudet. Pasear por sus calles es como trasladarse a un cuento, sus calles y casas de piedra adornadas con flores recuerdan a la famosa Alsacia. Sus arquitecturas encajan a la perfección con la naturaleza del lugar.
Tampoco puedes perderte en tu viaje a Ordino la Casa Rossell, una casa y una familia vinculada desde el siglo XV a la historia de Andorra. No se puede visitar por dentro pero sí existe un itinerario por los alrededores para descubrir los puntos clave de esta familia.
Qué hacer en Ordino
En Ordino, como ya hemos avanzado, hay diferentes actividades según la época del año. En invierno, el principal atractivo es la estación de esquí de Vallnord, a 10 minutos en coche de Ordino. Aunque también la parroquia cuenta con la estación de esquí de Ordino-Arcalís, con 30 kilómetros de pistas. Dentro de esta estación, debes hacerte una foto en el Anillo de Ordino y sorprenderte de cómo vence a la gravedad.
Para el resto del año también hay diversas actividades y rutas muy interesantes. Puedes hacer la ruta del Ferro donde, en verano, podrás visitar la mina de Llorts o la exposición permanente de esculturas de hierro a lo largo de la ruta realizadas por artistas contemporáneos.
Las vistas desde el Mirador solar de Tristaina
También puedes realizar una ruta de miradores y contemplar todo el Valle de Ordino. Uno de los miradores más impresionantes es el Mirador solar de Tristaina, ubicado en lo más alto del Pico Peyreguils, a 2701 metros. Este mirador circular impresiona por sus dimensiones, una circunferencia de 25 metros suspendida en el aire que ofrece una panorámica de 360º del valle.
Por último, otro mirador que no debes perderte es el Mirador del Roc del Quer. Una pasarela de más de 12 metros que vuela por encima de los valles de Montaup y del Valira d’Orient. Acceder a este mirador tiene un coste de 5€, que bien merece la pena, para contemplar esas vistas. Al final del mirador verás la escultura de un pensador sobre una viga, quien te dará una envidia profunda de poder ver todos los días estos impresionantes paisajes.
Dentro de la isla de Ibiza hay mil planes y mil viajes que hacer. No todo es fiesta en la isla pitiusa y es un destino ideal para familias, en pareja, para viajes de relax o de aventura (sin ser fiesta nocturna).
De hecho, mientras todo el ocio nocturno se concentra en la capital y por la zona de San Antoni, hay zonas más relajantes como Santa Eulalia, al norte de Ibiza capital que tiene mucho que ofrecer también. Aquí tienes una guía completa de qué hacer, dónde alojarse y dónde comer en Santa Eulalia para que tu solo pienses en disfrutar. ¡Comenzamos!
¿Dónde alojarse en Santa Eulalia?
Santa Eulalia en la costa este de la isla es un refugio de paz y tranquilidad para familias que quieren disfrutar de la isla pitiusa. Una de las zonas perfectas para alojarse en familia dentro de Santa Eulalia es Cala Llonga.
Cala Llonga
En esta zona te recomendamos alojarte en el Apartahotel El Pinarpara disfrutar de tus vacaciones, ya que cuenta con vistas espectaculares al mar, acceso directo a la cala y sus instalaciones están renovadas y muy completas. Además, está solo a 20 minutos del aeropuerto y del centro de Ibiza capital.
¿Qué ver y hacer?
El principal atractivo turístico de Santa Eulalia son sus playas y calas relajantes como Cala Mastella, Cala Nova o Cala Pou des Leó, todas ellas aptas para ir con niños, puesto que cuentan con todos los servicios necesarios.
Pero también en nuestra guía de Santa Eulalia puedes hacer más cosas que tomar el sol y bañarte en aguas turquesas. Como por ejemplo, pasear por el Paseo Marítimo de la Alameda que lleva hasta desembocadura del único río de la isla, que lleva el mismo nombre que el pueblo, o subir a la Iglesia de Santa Eulalia, ubicada en lo alto del Monte Puig de Missa; una iglesia que te recordará a las de Grecia, con esa fachada de cal desde donde podrás disfrutar de unas bonitas vistas.
Las Dalias
Desde aquí puedes visitar a menos de 10 minutos en coche el famoso mercado hippie de Las Dalias. Este mítico mercadillo nació en 1954 y desde entonces ha ido evolucionando hasta ser uno de los puntos turísticos de referencia de la isla, un imprescindible de cualquier viaje a Ibiza.
¿Dónde comer?
Más allá de la capital, Santa Eulalia es considerada un referente dentro de la gastronomía pitiusa. Grandes restaurantes se sitúan aquí y podrás degustar platos de la más alta gastronomía española, internacional y local adaptada a todos los bolsillos.
Etxeko
Si nos centramos en la alta cocina, aquí podrás probar platos de Martín Berasategui en el Etxeko, brasas con productos de alta calidad en La Llama o disfrutar de una cena sobre el mar en el Amante, en Cala Llonga.
Para las economías más asequibles hay opciones muy buenas como Aiyanna Ibiza un restaurante sobre la arena de Cala Llonga con un ambiente divertido y acompañado de cócteles sabrosos.
También si quieres disfrutar de un buen asador con carnes traídas desde Uruguay tienes que ir al Restaurante San Carlos, a las afueras de Santa Eulalia. Por último, dentro del propio paseo marítimo tienes el Ve Café, con opciones vegetarianas y veganas con productos locales y orgánicos, algo diferente para tus vacaciones.
La isla más pequeña de Baleares sorprende más allá de sus playas. Es un destino para disfrutar en familia o de una escapada romántica. Hay tanto qué ver y qué hacer en Formentera que aquí vamos a darte algunas ideas para poder aprovechar esta isla en tus vacaciones.
Si tienes pensado visitar Formentera lo ideal es ir 4 días para que te dé tiempo a ver sus playas, sus pueblos y alguna otra sorpresa que tiene escondida, ¿quieres saber todo sobre Formentera? Sigue leyendo.
Cómo llegar a Formentera
La forma más común de llegar a Formentera es a través de ferry. Tienes múltiples horarios para llegar a lo largo del día. Este ferryes el medio más cómodo y rápido para llegar a la isla, ya que solo tardarás media hora desde Ibiza al puerto de La Savina en Formentera.
Puedes ir y volver en el día, muchos visitantes lo hacen, pero te recomendamos alojarte en Formentera para disfrutar de los atardeceres y el ambiente nocturno de la isla.
Una vez en Formentera te recomendamos que te muevas en moto. Te dará más libertad de recorrer los infinitos rincones de la isla de una forma más rápida y respirar el aire isleño.
Qué ver en Formentera
Aguas cristalinas, la seña de identidad de las playas de Formentera
El principal atractivo turístico de Formentera son sus paradisíacas playas, que nada tienen que envidiar al Caribe o al Sudeste Asiático.
La más famosa de sus playas es Ses Illetes. Ha sido declarada varias veces como la playa más bonita del mundo, y no es para menos. Sus aguas turquesa y su arena fina y blanca hacen que sea la playa perfecta. Está dentro del Parque Natural de Ses Salines de Eivissa y Formentera, por lo que tendrás que pagar una pequeña tasa para acceder en coche o en moto a ella.
También está la costa occidental, conocida como Migjorn, que es el refugio de los bañistas cuando sopla el viento. Esta costa se divide en diferentes playas y calas, ya que son 5 kilómetros de baño. Mal Pas, Codol Foradat o Ca Marí son algunas de las playas y calas que están en esta costa tan popular entre los visitantes y los lugareños para disfrutar de las aguas del Mediterráneo.
Si tienes tiempo, no dejes pasar la oportunidad de conocer otras playas y calas como: Cala Saona con sus arenas rojas, Llevant, casi virgen o Ses Platgetes al norte de Formentera.
Qué hacer en Formentera
Pero no solo son las playas de Formentera lo que la hace tan especial. Y es que sus pueblos, su gastronomía y sus faros son puntos también muy atractivos de la isla.
¿Sabías que Formentera cuenta con una ruta fotográfica? Sí, a lo largo de la isla encontrarás puntos señalizados para que saques la instantánea perfecta. Podrás encontrar el mapa de estos puntos en la oficina de turismo.
Los faros de Formentera, un icono de la isla
Y si hablamos de fotografías, no debes pasar por alto una de las estampas más famosas de Formentera, el Faro de Cap de Barbaria, famoso por aparecer en la película de ‘Lucía y el sexo’. Pero también debes visitar otro faro importante, el Faro de la Mola; situado en el punto más alto de la isla con unas imponentes vistas sobre un acantilado. Si te interesan estos dos faros, te recomendamos hacer la ruta de los faros de Formentera que, además, te llevará a los puntos más lejanos de la isla.
Para terminar, y no menos importante, en tu visita debes probar la gastronomía local, y es que en la isla también hay productos tan ricos como el peix sec ( o pescado seco) o la miel. ¿El mejor plan? Coge dos copas de vino de la isla y disfruta del atardecer mágico de Formentera, se te grabará a fuego en la mente.
Menorca es principalmente conocida como un destino de sol y playa, pero la segunda isla más grande de Baleares tiene sorpresas para los que se adentren a descubrirla un poco más. Si solo dispones de dos días para visitar Menorca, aquí te enseñamos qué hacer para vivirla a fondo.
Alquilar un coche para recorrer la isla
Lo primero que debes hacer nada más pisar la isla es coger un alquiler de coche en el aeropuerto de Menorca. De esta forma tendrás más libertad y podrás aprovechar más tus dos días en Menorca.
Además, conducir por Menorca es muy sencillo, las carreteras son muy buenas y llanas. Será tu mejor aliado para ver Menorca en dos días.
Ver las calas más famosas…
Cala Macarelleta
Pues sí, porque no puedes irte de Menorca sin ver Cala Macarella, Macarelleta, Turqueta, Galdana, Mitjana, en Porter, etc. Arenas finas, aguas cristalinas y de azul turquesa espectacular son las premisas de las playas y calas de Menorca. Además, en algunas de ellas existe una vegetación que hace un contraste precioso.
Si vas en verano, debes madrugar para ir con tiempo y poder aparcar en los parkings disponibles en las calas, y más en estas que son las más codiciadas por los visitantes. De camino a ellas encontrarás señalizaciones que te indican el nivel de ocupación para poder programarte el día.
…Y las playas salvajes
También existen playas escondidas y salvajes que solo es posible si coges alguna de las excursiones en barco en Menorca que hay disponibles. Con estas excursiones podrás ver desde otra perspectiva las playas más especiales de Menorca.
Por otro lado, vivirás una experiencia única, navegando y descubriendo también cuevas que solo son accesibles si vas en baro.
Disfrutar del atardecer
Cova d´en Xoroi
En tus dos días en Menorca una cosa que debes hacer, al menos una vez, es disfrutar de un atardecer de infarto. Un lugar especial donde dejarte llevar por esta experiencia es la Cova d´en Xoroi. Un bar/discoteca enclavada, y nunca mejor dicho, en un acantilado de Menorca.
En este bar de día y discoteca de noche podrás ver el atardecer encina del mar. Todo un espectáculo que no olvidarás nunca.
Viajar a Marte
Cala Pregonda
Disfruta de una playa diferente con aguas cristalinas pero con arena roja, como salida del mismísimo planeta de Marte. Cala Pregonda es muy diferente a todas las demás playas y calas de Menorca. Para llegar a ella deberás dejar el coche en el parking y andar unos 10 minutos hasta llegar a ella.
Callejear por la Ciudadella o Mahón
En tus dos días en Menorca deja un hueco para pasear, al menos, por alguna de las dos grandes poblaciones de la isla. Ambas ciudades cuentan con puerto, por lo que dar un paseo nocturno por él será muy placentero.
Además, las callecitas con ese aire isleño, las casas de pescadores y sus edificios de piedra hacen de ambas poblaciones una visita que no debes pasar por alto en tu viaje.
¿Más allá de dos días?
Si tienes más de dos días para viajar a Menorca, te contamos qué hacer en la segunda isla más grande de Baleares para completar tu viaje.
Rutas de senderismo
Pues sí, puedes hacer varias rutas de senderismo. Caminar por el barranco de Algendar, con su ruta de «es Pas d’en Revull» o adentrarte en la cantera de Santa Ponça son algunas de las joyas no tan conocidas de Menorca y que te enseñará otra cara de la isla.
Visitar las ruinas talayóticas
Estos antiguos asentamientos datan de la prehistoria y algunos de ellos se conservan tal y como estaban en su época. Algunas de las visitas que puedes realizar son el poblado de Montefí, Biniaiet o la cueva des Coloms, donde realizaban rituales talayóticos.
Si estás pensando en visitar Granada te encontrarás con una ciudad que cumple todos los requisitos para disfrutar de una escapada top. Historia, gastronomía, cultura, actividades y una puesta de sol que, difícilmente, se te olvidará. Todo esto lo encontrarás en la ciudad que se divide entre el mundo occidental y el mundo árabe.
Además, si quieres disfrutar de una forma diferente de tu estancia prueba a hacerlo en un alquiler casa cueva en Granada. En este tipo de alojamientos estarás en el corazón de la ciudad con vistas a La Alhambra viviendo una experiencia única. Sin renunciar a las comodidades de un alojamiento convencional. ¿Quieres descubrir qué debes ver en Granada un fin de semana? ¡Sigue leyendo!
Visitar la Alhambra
La Alhambra, una visita obligada
Considerada la octava maravilla del mundo por muchos, es la visita por excelencia que debes ver en Granada. En este conjunto de palacios, jardines y edificios militares confluyen diferentes estilos arquitectónicos y artísticos.
Déjate atrapar por los estucos de las paredes y los techos, sus mil salas desde las que divisar la ciudad o los jardines perfectamente cuidados. Si quieres descubrir La Alhambra en todo su esplendor debes hacer la visita con una guía o audioguía.
Pasear por el Albaicín y Sacromonte
Casa cueva de los Amaya
Ármate con un buen calzado y empieza a subir cuestas desde el Paseo de los tristes, conocido así por los cortejos fúnebres que pasaban por este paseo, por estos dos barrios que son lo más típico de Granada. Entre callejuelas y casas cueva, encontrarás tablaos flamencos donde poder disfrutar de un buen espectáculo, o como lo llaman aquí Zambras.
Además, el barrio del Albaicín es el más antiguo de la ciudad, donde convivieron árabes, judíos y cistianos durante siglos. Pasear por estos barrios es pasear entre casas centenarias que conservan sus raíces y adentrarte en épocas de antaño. Disfruta y relájate en las plazas que encontrarás a tu paso y, en especial, en el Mirador de San Nicolás.
Mirador de San Nicolás
El Mirador siempre con ambiente
En lo alto del barrio del Albaicín se encuentra este mirador desde donde poder contemplar, en todo su esplendor La Alhambra y toda la ciudad. No debes perderte el atardecer desde este punto. Además, si tienes suerte, podrás disfrutar de algún guitarrista tocando algo de flamenco.
A la espalda de este mirador, está la Plaza del cementerio de San Nicolás, donde hay varios bares y restaurantes, no dejes de comer en el Kiki, donde siempre habrá buena música esperándote.
Catedral de Granada
El altar mayor de la Catedral de Granada
Situada donde estuvo la Mezquita Real anteriormente, Isabel La Católica mandó construir la Catedral de Granada. Si te fijas en la fachada, verás que solo está terminada una de las torres campanario, la otra nunca llegó a terminarse.
Además, junto a la Catedral, en la Capilla Real, podrás ver y visitar el Mausoleo de los Reyes Católicos, enterrados aquí por expreso deseo de ellos en 1517, un año después de la muerte del Rey Fernando.
Alcaicería
Muy cerca de la Catedral de Granada tienes que ver el antiguo zoco nazarí o alcaicería de Granada. Aquí encontrarás diversas tiendas de artesanía de cuero, cristal, loza o madera.
Aunque no tenga las mismas proporciones que los zocos que puedas encontrar en Marruecos o Turquía, la esencia de recorrer pasillos y recovecos está presente también en la alcaicería. Reminiscencia de las raíces árabes que se respira por toda la ciudad y que, por ello, la hacen tan especial.
Asturias es una tierra llena de preciosos lugares que visitar y paisajes para todos los gustos. En apenas unos kilómetros, puedes llegar de la montaña a la playa y disfrutar en un solo día de todo lo que ofrece esta tierra. Por no hablar de la gastronomía y la cultura que te cautivarán desde el primer momento.
Hoy queremos, de la mano de Ruralia, algunos de los pueblos más bonitos de Asturias. Recorreremos cuatro lugares imprescindibles, de los que no puedes perderte si pasas por aquí cerca. ¿Vienes con nosotros?
Descubre Asturias a través de cuatro pueblos mágicos
Cudillero
Empezamos por una villa marinera que, a pesar de los años y del creciente turismo reciente, no ha perdido el encanto de sus raíces. Los colores azules y verdes del mar y la vegetación cubren todo Cudillero, que desde el Siglo XIII ha sabido sacar lo mejor del lugar en el que se encuentra.
Más allá de la importancia pesquera de su puerto o su faro, también te recomendamos que visites la Plaza de la Marina y el Anfiteatro, dos de los puntos más emblemáticos de Cudillero. Este lugar, además, está lleno de miradores que te permitirán mirar hacia el mar desde diferentes perspectivas.
Cangas de Onís
Cangas de Onís es la puerta de entradas desde Asturias hacia los Picos de Europa. Tierra de pastores, de buenos quesos y mejor gastronomía, ha sido testigo de la historia que rodea a la comarca. Se trata de la primera ciudad y corte de la Monarquía Asturiana, por lo que podrás perderte por sus calles para conocer más sobre los últimos siglos.
Como decimos, también es punto de inicio de decenas de rutas de senderismo. El Parque Nacional de los Picos de Europa y el Real Sitio de Covadonga son visitas que no pueden dejarse pasar, como las antiguas minas de hierro de Buferrera o los descensos por el Sella, el Güeña o el Dobra.
Ribadesella
En Ribadesella podrás perderte una y mil veces, y siempre descubrirás un nuevo rincón que te enamorará. Lugar emblemático del arte, del deporte y de la naturaleza; lo tiene todo para que puedas disfrutar de unos días de máxima relajación.
Desde el Casco Histórico hasta la playa de la Atalaya, encontrarás decenas de recovecos que harán tu visita una delicia. Darse una vuelta en el Paseo del Muelle, llamado Princesa Letizia porque la hoy reina de España pasaba sus veranos aquí, es ir conociendo y descubriendo la escena marinera de la villa.
Llanes
Terminamos con Llanes, un núcleo poblacional del que existen referencias incluso en el Siglo XII, y que se ha convertido en un lugar de referencia para muchos turistas. Pasear por el centro histórico, declarado Conjunto Histórico-Artístico es simplemente una delicia.
Las murallas del Siglo XIII, la Basílica de Santa María o el Palacio de Castañaga son solo algunos de los puntos de interés que llamarán tu atención. Pero hay mucho más, como descubrirás si te decides a caminar por el Paseo de San Pedro, posiblemente el lugar con mejores vistas de todo Llanes.
Cuando hablamos de Zamora lo primero que se nos viene a la mente es su Semana Santa, pero tiene mucho más para los que nos adentramos en las provincias del interior de España. En los pueblos de Zamora parece que el tiempo se ha detenido y se puede disfrutar de la tranquilidad junto con la naturaleza o la historia.
¿Sabías que hay piscinas naturales Zamora? ¿O que puedes ver unos fiordos rozando Portugal? ¿O conocer una de las residencias habituales de los Reyes Católicos? Todo esto y mucho más podrás verlo si visitas Zamora, ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!
Toro
Colegiata de Santa María la Mayor
Es uno de los pueblos más famosos de Zamora. Toro en Zamora cuenta con su Denominación de Origen de su famoso vino. Pero más allá de ser una de las cunas del turismo enológico de Zamora, Toro cuenta con un patrimonio único.
Si tienes pensado pasar un día (o más) en Toro no puedes perderte su Alcázar del siglo X, el cual era utilizado por los Reyes Católicos para sus estancias en la provincia y desde donde tendrás unas magníficas vistas al Duero. Además, el icono del pueblo es la Colegiata de Santa María la Mayor, con su famoso cimborrio y su Pórtico de la Majestad con su policromía original. Tampoco puedes perderte el Monasterio de Sancti Spiritus el Real, con el sepulcro de Beatriz de Portugal.
También aquí podrás ver la plaza de toros más antigua de España construida con este fin que casi pasa desapercibida desde la calle. Y no te irás de Toro sin pasar por su concurrida Plaza Mayor, con el Ayuntamiento, y ver su preciosa Torre del Reloj. Y ni que decir tiene que tendrás que llevarte de recuerdo una botella, o varias, de alguna de sus bodegas para degustar en tu casa a la vuelta.
Puebla de Sanabria
Iglesia de Santa María de Azogue y Castillo de los Condes de Benavente
En lo alto de un risco, desde su posición defensora, se erige uno de los pueblos más bonitos de España. Puebla de Sanabria, tras sus muros, te teletransporta al pasado. Su casco histórico (prácticamente todo el pueblo) está muy bien conservado.
Paseando por sus calles encontrarás en las fachadas de las casas, ornamentos y blasones que datan de la Edad Media y el Castillo de los Condes de Benavente, el edificio más representativo de Puebla de Sanabria. Una vez que llegues a la Plaza del Ayuntamiento te encontrarás con varios edificios de interés, como es el propio Ayuntamiento, construido en la época de los Reyes Católicos y la Iglesia de Santa María de Azogue, una mezcla de estilo renacentista y gótico.
Además, en tu visita a Puebla de Sanabria no puedes perderte su Museo de Gigantes y Cabezudos, ya que este pueblo cuenta con una larga tradición sobre estos festejos. Y como colofón a unos días de relax en los pueblos de Zamora, debes visitar el lago de Sanabria y hacer senderismo para volver con las pilas bien cargadas.
Benavente
Es uno de los pueblos más importantes de Zamora, gracias a su enclave estratégico de cruces de rutas comerciales o el Camino de Santiago, han hecho posible que Benavante posea un patrimonio arquitectónico envidiable.
Algunos de sus edificios más emblemáticos son templos religiosos, como la Iglesia de Santa María de Azogue, sí el mismo nombre que en Puebla de Sanabria, o la Iglesia de San Juan del Mercado. También el Castillo Palacio de los Pimentel, en la actualidad el Parador Nacional, y su famosa Torre de Caracol.
Parece no encajar con el estilo castellano, pero el Teatro Reina Sofía con su fachada modernista y su interior restaurado bien merece que se visite en una de sus funciones. Y si quieres tener una hermosa perspectiva del pueblo, debes ir al Arco del puente del jardín, que antiguamente daba entrada al jardín de los condes, y desde donde podrás ver el castillo junto con los jardines de la Mota.
Fermoselle
Callejear el mejor turismo en Fermoselle
Dentro de los Arribes del Duero, los fiordos españoles, se encuentra Fermoselle. Un pueblo declarado Conjunto Histórico, Artístico, Cultural y Arquitectónico. Y es que perderse por las calles de Fermoselle es el mayor imprescindible en su visita.
Más allá de edificios como el Ayuntamiento, la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción o los restos del Castillo de Doña Urraca, Fermoselle también es famoso por ser el pueblo de las 1000 bodegas; y es que bajo las cuestas y calles empedradas se encuentran cientos de bodegas de vino familiares. Algunas de ellas se pueden visitar y otras siguen abandonadas y cubiertas de musgo.
Y si eres amante de los miradores, en Fermoselle disfrutarás de grandes paisajes y puestas de sol. No puedes pasar por alto el Mirador del Castillo de Doña Urraca, el Mirador del Torojón o el Mirador de las Escaleras, a las afueras del pueblo.
Dónde comer sano
Dentro de cada viaje siempre nos interesamos por degustar platos típicos de la zona y estando en la Castilla profunda, con una gastronomía tan variada y exquisita, se hace difícil la elección. Por eso en dónde comer sano podemos encontrar una selección de restaurantes de calidad y, a la vez, sostenibles para poder contribuir así a un turismo ecológico y con huella cero.
Barcelona es especial, tiene mil y una caras; cuenta con un patrimonio único en el mundo, un ambiente bohemio y moderno, a la vez, y ofrece a los que la visitan cientos de planes yalojamientos especiales, como un hotel en Sant Gervasi, adaptados a los gustos de cada uno. Todos conocemos los imprescindibles de la ciudad, como la Basílica de la Sagrada Familia, La Pedrera, el Parque Güell, Casa Batlló, etc. pero Barcelona cuenta con lugares especiales que no deben pasarse por alto en un viaje a la capital catalana, ¿quieres conocer cuáles son?
Bunkers El Carmel
Una panorámica especial
Muy cerca del Parque Güell, y de los hoteles en Sarrià Barcelona, a unos 30 minutos andando se llega a este mirador conocido como ‘los bunkers’ desde donde obtendrás una panorámica espectacular de la ciudad de 360º.
En realidad nunca hubo en este lugar unos bunkers. En la cima del Turó de la Rovira lo que hubo en la Guerra Civil fueron una batería antiaérea, que se asemejaba a un búnker, pero popularmente se quedó con este nombre.
Lo mejor: ir al anochecer y contemplar una puesta de sol magnífica desde las alturas con la ciudad de Barcelona a tus pies.
Mural del beso
Foto cedida por Curiositravel
Se ubica enfrente de la Catedral de Barcelona, en el Barrio Gótico, y desde que se realizó este fotomural en el 2014, los románticos que quieren hacerse una foto en él ha ido en aumento.
Este mural, realizado por el fotógrafo Joan Fontcuberta, nació de la iniciativa de El Periódico de Catalunya para conmemorar el tricentenario de la derrota catalana en la Guerra de Sucesión, en 1714, y este mural que iba a ser temporal, el Ayuntamiento decidió dejarlo permanentemente.
Si quieres hacerte una foto delante de él, dándote un beso, por supuesto, debes ir a la Plaza Isidre Nonell, no tiene pérdida.
Palau de la Música Catalana
El interior del Palau de la Música Catalana
Muy cerca del mural se encuentra el Palau de la Música Catalana; Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997, se dice del Palau que es el edificio más modernista del mundo y, aunque el máximo artista de este movimiento fue Gaudí, el edificio fue obra del político Lluís Domènech i Montaner.
Este palacio es una obra de arte tanto por fuera como por dentro. Contó con diversos artistas y escultores para los diferentes espacios del edificio, vidrieras, esculturas, mosaicos y balaustradas fueron diseñadas por grandes nombres catalanes.
Si tienes oportunidad de disfrutar de un concierto en él serás un afortunado, sino, no puedes perderte este precioso edificio. Puedes visitarlo por libre, la entrada cuesta 10€, o con visita guiada, por 14€. De una u otra forma, no te arrepentirás de ver esta obra de arte en el barrio gótico de Barcelona.
Tibidabo
Una puesta de sol espectacular
Uno de los lugares especiales en Barcelona que se divisa desde cualquier parte de la ciudad es el Tibidabo. Sí, eso que ves al fondo, ese pico enorme, es el Tibidabo. Y es que el Tibidabo ha ido cobrando vida poco a poco, hasta convertirse en una visita imprescindible dentro de un viaje a Barcelona.
En él se puede disfrutar del Parque de atracciones más antiguo de Barcelona, con atracciones clásicas que hacen las delicias de niños y adultos; el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón, un templo que te recordará al Sacre Coeur de Montmartre; el Observatorio de Fabra, para que te sientas como en la película de ‘La la land’ o la Torre de Collserola, creada por el famoso arquitecto Norman Foster.
Vayas a donde vayas dentro del Tibidabo, de lo que estamos seguros que disfrutarás serán de las vistas impresionantes de toda la ciudad de Barcelona a tus pies.
La Basílica de Santa María del Mar
Máxima expresión del Gótico catalán
Puede que no te resulte tan popular este nombre como La Catedral del Mar, el famoso libro y serie del escritor Ildelfonso Falcones. Este es uno de los lugares especiales en Barcelona que inspiró al escritor para su bestseller y, aunque en el libro se hable de Catedral, en realidad es una Basílica que fue construida con el sudor de la frente de los vecinos del barrio.
Dentro de ella puedes admirar el estilo gótico catalán construido con bloques de piedras, traídos desde Montjuic, que se elevan al cielo de una forma sobria pero liviana, a la vez.
Dos curiosidades de esta Basílica, la primera, antiguamente el puerto se ubicaba muy cerca de aquí de ahí su popular nombre, conocida también como la Basílica de los pescadores; y la segunda, si te fijas en las vidrieras podrás ver en una de ellas el escudo del Fútbol Club Barcelona, que financió parte de la reconstrucción de las vidrieras en los años 60, de ahí el homenaje al club.
Uno de los grandes atractivos de viajar por las Rías Baixas es su gastronomía. De sobra es conocido que en Galicia se come genial. Un producto de gran calidad, muy fresco, raciones grandes y muy bien de precio. Comer en Rías Baixas es una parte fundamental del viaje que debes disfrutar tanto como visitar una ciudad, las Islas Cíes o contemplar las mejores puestas de sol.
Aquí te contamos los consejos básicos para que disfrutes de esta gran experiencia y vuelvas más enamorado de Galicia y supere tus expectativas. #GaliciaCalidade.
¿Qué comer en Rías Baixas?
Lo primero que te vendrá a la mente será el marisco y el pulpo. Pues sí, es de lo mejor que puedes comer en las Rías Baixas, pero si no eres de este tipo de platos (que las hay) también puedes disfrutar de grandes platos de la huerta y de unas carnes muy buenas. Aquí te contamos una pequeña selección de platos que debes probar…
Marisco
Es el producto estrella y si de verdad te gusta estás en el sitio más indicado. Las raciones de pulpo, percebes, zamburiñas o navajas corren de lo lindo por las Rías Baixas, además a unos precios increíbles. No dejes de probar el pulpo a la brasa, una forma diferente a la que estamos acostumbrados.
Si visitas Vigo no puedes dejar de probar las ostras en la calle dedicada a las mismas. Verás varios puestos de ostras en la calle donde las abren ahí mismo y con un chorrito de limón las venden directamente. Del mar a tu boca directamente.
Pulpo a la brasa que no falte
Patatas con alioli negro
Carnes
No solo de marisco viven los gallegos. Sus carnes criadas en esos infinitos pastos gozan de una calidad impresionante. Les gusta mucho hacer las carnes a la brasa y no puedes perderte un buen churrasco gallego, pero también hay otros platos como el raxo o la zorza; ambos platos están hechos con carne de cerdo.
Ración de Raxo con patatas fritas caseras
El raxo es lomo de cerdo aderezado con ajos y perejil hecho a la plancha, mientras que la zorza puedes encontrarla también en forma de lomo de cerdo o en picadillo, ambas versiones están adobadas con pimentón y a la plancha. Siempre se acompaña de patatas fritas caseras y suelen ser raciones muy abundantes.
De la huerta
También Galicia cuenta con una huerta nada envidiable a otras partes de España. Su producto estrella son los pimientos de Padrón, unos pican y otros no. Pero también están los grelos y las berzas, especialmente consumidos en invierno en sopas.
Mirador Monte do príncipe, Islas Cíes
Además, por su gran consumo con el pulpo, hay también una variedad de patatas gallegas que pueden servírtelas en tortilla, en puré o con alioli negro (con tinta de calamar) como comimos en Ourense.
Aunque si vas a comer en las Rías Baixas y ves una ración de tomate con aceite y sal, no dudes y pídetelo, esos tomates son como los de antes, enormes y con gran sabor, una delicia.
¿Dónde comer en Rías Baixas?
Si bien es verdad que los restaurantes en Galicia, y en Rías Baixas están por todos lados y en cualquiera comerás fenomenal, no te pierdas la experiencia de comer en chiringuitos que veas en las playas, como por ejemplo los que te puedes encontrar en toda la cosa de San Vicente do Mar, si vas en temporada alta, deberás reservar para poder comer en ellos.
Comer en la playa
Costillas gallegas a la brasa
Otro tipo de restaurante que no te puedes perder si vas a comer en las Rías Baixas son los denominados Furanchos. Casas, a veces particulares, donde los dueños antiguamente vendían el excedente de sus huertos para la gente de fuera. Son restaurantes muy pequeños de apenas 10 o 15 mesas en los que puedes comer verdadera comida casera.
Furanchos
Como te he contado los furanchos son casas o fincas que tienen huerto y venden el excedente de su huerto en forma de restaurante casero. Ni que decir tiene que las raciones, como en casi todo Galicia, son enormes y los precios son más económicos que en los restaurantes habituales. Puedes comer en un furancho dos personas con 2 raciones y bebidas por unos 20€ en total, en verano.
En los furanchos no te encontrarás una extensa carta, de hecho, en algunos no hay ni carta, son unas cuantas raciones, tanto de excedentes de la huerta, como platos y productos frescos comprados fuera. Tienen opciones tanto de carne como de pescado, y no puede faltar el pulpo entre sus platos o la tortilla de patatas. No te confíes con los precios, las raciones son enormes y no podrás comerte más de dos raciones si sois dos personas.
No están en grandes núcleos, más bien apartados y en pequeñas urbanizaciones, no olvides que son casas particulares muchas de ellas. Cuando vayas a un furancho pregunta por dos cosas: si tienen vino y especialidad de la casa, casi todos los furanchos tienen el suyo.
Antes de ir a alguno de ellos es mejor que llames para asegurarte de que está abierto, también cierran ciertos días para descansar o al mediodía, y reservar mesa, si las aceptan, en temporada alta por si acaso.
Listado de Furanchos
Puedes hacer una búsqueda rápida en Google de furanchos para ver los que están por tu zona. Aquí te dejo un pequeño listado de los que pudimos probar y vayas a tiro hecho.
Furancho do Laranxo
Entrada Furancho do Laranxo
Es el típico furancho, una terraza al aire libre con mesas y sillas de jardín. Te lo recomiendo por el buen trato que te da la familia y la buena comida que ofrece. No pudimos comer zamburiñas más grandes en todo Galicia.
Aunque te parezca estar alejado de las playas y de los puntos turísticos, no lo está y puedes estar en la playa en menos de 10 minutos. Aparcar a las afueras puede ser un pelín complicado por estar en una calle estrecha, pero muy cerca verás una plaza donde poder dejar el coche.
La Maruca
Pulpo en La Maruca
Tomate de la huerta y chopitos
Este furancho se ha hecho muy popular y ya tiene la categoría de taberna. Está muy concurrido en verano, sobre todo a la hora de cenar, aceptan reservas, y te recomiendo que llames para reservar, en temporada alta, incluso con un día de antelación o varios si es para el fin de semana.
Su decoración como de casita de campo lleno de flores y madera, invita a pasar una velada muy agradable.
De entre los platos que tienen, no puedes perderte su tomate de la huerta con sal y aceite, volverás a comer un verdadero tomate.
Furancho Cachopal
Es el más cercano a la famosa playa de la Lanzada. Nos lo recomendaron gente de la zona, pero cuando fuimos a reservar mesa no pudimos hacerlo. Al ser una recomendación local, te lo recomiendo y si vas, coméntanos para darnos envidia.
Almería es, junto con Cádiz, la provincia de España con más rachas de viento. Es por eso que si nos toca en nuestras vacaciones o viaje una racha de levante o poniente tengamos claro a qué playas de Cabo de Gata podemos ir para que no nos fastidie.
Además, estas rachas no suelen durar uno o dos días, puede llegar a durar más de dos semanas, y si nuestras vacaciones son de una semana puede que no disfrutemos de las preciosas calas y playas de Cabo de Gata por culpa del viento.
Aquí te dejamos un listado de las playas del Parque Natural de Cabo de Gata en función del viento de levante o poniente. ¡Disfrútalas!
Playas con levante en Cabo de Gata
Para que lo identifiquemos bien, es el aire que viene de donde sale el sol. Es constante, no cesa en todo el día, levanta mucha marea y es más bien fresco. Si te toca este tipo de aire en tu viaje tendrás la sensación es muy molesta, ya que no para nunca y, si estás en la playa, prepárate para sujetar bien la sombrilla si no vas a la playa o cala correcta. Comenzamos con nuestro listado de playas de levante o poniente en Cabo de Gata.
Es la mejor playa a la que puedes ir si hay levante en Cabo de Gata. Se encuentra en el pequeño pueblo costero del mismo nombre. De aguas cristalinas y con sus 600 metros de longitud, casi sin gente entre diario, son perfectos para los días de levante.
Es de arena, su acceso es fácil, cuenta con escaleras y rampas y la entrada al agua es muy agradable. Si estás en esta playa puedes ir a ver el atardecer desde el Faro de Cabo de Gata y también visitar el Arrecife de las Sirenas. Desde aquí verás que parten muchas excursiones en kayak, ya que muy cerca puedes disfrutar de cuevas impresionantes, ver el Cabo de Gata desde el mar y disfrutar de su costa azul cristalina. Puedes reservar tu excursión en kayak aquí.
Playa de las Salinas
Esta playa es la más cercana al pueblo de Cabo de Gata. Tiene 2,5 kilómetros de extensión y es de arena fina. Debe su nombre a las salinas que hay justo a sus espaldas. Aparcar en ella es fácil, a ambos lados de la carretera existen espacios para aparcar, aunque tienes que tener cuidado ya que en algunos huecos se te puede quedar el coche por culpa de la arena. ¡ah! no pretendas ir a las 12 de la mañana, no encontrarás sitio en temporada alta.
El acceso a la playa es muy sencillo, no hay rampas ni escaleras, solamente una pasarela que te lleva directamente a la playa. Esta playa, al igual que la Fabriquilla, está resguardada por el Cabo de Gata, por lo que el levante no te afectará y pasarás un gran día de playa.
Si estás en esta playa, no puedes irte sin pasar por la Iglesia de las Salinas, el único edificio que se conserva del núcleo de viviendas de los salineros que hubo en su día.
Playa del Retamar
Su paseo marítimo de noche
Esta playa está en la localidad de Retamar donde se concentran la mayoría de los grandes hoteles más próximos al Parque natural de Cabo de Gata. No es especialmente bonita, pero para ir a darte un chapuzón los días en los que hace levante, de sobra. Tiene un paseo marítimo muy bonito para pasear especialmente de noche y una zona de restaurantes donde degustar las tapas de Almería.
El acceso es a través de rampas y en las inmediaciones hay varios parkings para aparcar.
Playas con poniente en Cabo de Gata
En cambio, el viento de poniente viene del Oeste y, normalmente, de África, por lo que es seco y caliente. No es tan molesto como el levante y es propicio para disfrutar de las playas y calas más famosas de Cabo de Gata.
Las habrás visto en muchas guías pero no puedo dejar de citarlas en este listado de playas de levante o poniente en Cabo de Gata con algunos consejos prácticos.
Playa de los Muertos
Playa de los Muertos, de las mejores de España
La más famosa de Cabo de Gata y considerada durante muchos años como la mejor playa de España. Y sí puede serlo, sus aguas cristalinas con cantos rodados y su acantilado la hace un sitio muy especial.
El parking cuesta 5€ por día y está en la carretera. Una vez dejas el coche deberás bajar un camino de tierra con pendiente durante unos 10 minutos para llegar hasta ella. No es de fácil acceso para algunas personas. Además, no cuenta con servicios de playa, llévate comida y bebida para pasar el día allí.
Los Escullos
Los Escullos y La Isleta del Moro
Particularmente nos encanta esta playa. Su fácil acceso, sus aguas tranquilas, su duna fosilizada tan fotografiada y su cercanía a La Isleta del Moro, un pueblo que no debes perderte, la hace que sea nuestra preferida.
Cuenta con dos parkings gratuitos de tierra que quedan a nivel de la playa. Como casi todas las playas del Parque Natural de Cabo de Gata, no cuentan con servicios en la playa, aunque esta tiene un restaurante/ chill out donde tomar algo en el parking.
Verás a gente entrando con escarpines al agua, en la orilla hay pequeñas piedras pero nada incomodas, puedes entrar sin escarpines sin problema, ya que pasada estas pequeñas piedras te encuentras con arena fina.
En tu visita a Los Escullos debes pasarte por su duna fosilizada blanquecina para contemplar desde allí la costa turquesa e ir hasta la Cala Abajarillo.
Como he dicho, nos gusta porque está cerca del pueblo de La Isleta del Moro, si puedes no dejes de comer en el restaurante con las mejores vistas del pueblo, La Ola. Si vas en temporada alta hártate de esperar o ve a primera hora de la comida para que te den el mejor sitio de la terraza sobre el mar.
El Playazo de Rodalquilar
El Playazo se debe a su nombre
Al igual que Los Escullos, es una playa con un acceso muy fácil, sin servicios y con un parking gratuito. En temporada alta es mejor que vayas antes de las 11 de la mañana para encontrar sitio en su gran parking, si te quedas sin sitio no podrás aparcar en la carretera ya que está bien señalizado su prohibición.
Su situación,como las anteriores, en la costa este del Cabo de Gata las resguarda del viento de poniente, haciendo que disfrutes de las aguas en calma y azules.
Si te vas a la parte más al norte de la playa podrás hacer snorkel pegado a las rocas. Todo el Parque Natural de Cabo de Gata es ideal para los amantes del snorkel y en cualquier playa lo disfrutarás. No dudes en reservar una excursión de snorkel aquí.
Los Genoveses – Barronal – Mónsul – Cala Media luna
Estas cuatro playas y calas de Cabo de Gata, y alguna más, están concentradas en el mismo camino y el acceso a todas ellas cuesta 5€ al día; si sales del recinto y vuelves a entrar el mismo día tendrás que pagar de nuevo. Dentro no hay restaurantes ni chiringuitos así que prepárate para pasar un buen día de playa si tienes viento de poniente.
A la entrada de cada playa podrás ver qué tipo de bandera tienes ese día y si no te convence continuar hasta la siguiente. En verano verás a personal aconsejandote a dónde ir y dando indicaciones de dónde aparcar. Las caravanas pueden entrar a este recinto y son aparcadas en zonas especiales, aunque no se pueden quedar por la noche.
Si no tienes coche, existe un servicio de autobús que sale desde el pueblo de San José y cuesta 2,7€ ida y vuelta y pasa por todas las playas, puedes usar ese ticket durante todo el día para desplazarte de unas playas a otras.
Merece mucho la pena pasar uno o dos días en esta zona de calas y playas para descubrirlas todas y ver en todo su esplendor el Parque Natural de Cabo de Gata.
Una de las cascadas más cercanas a Madrid es la Cascada del Hervidero, en San Agustín del Guadalix. Se encuentra a unos 30 km de Madrid en dirección Burgos por la A1. En menos de media hora estarás en una ruta corta, para hacerla en una mañana, adaptada para todas las edades que te dará la posibilidad de ver dos cascadas al precio de una. En este post te contamos lo necesario para disfrutar de esta ruta sencillita pero muy atractiva.
Consejos
Como te hemos adelantado, esta ruta hacia la Cascada del Hervidero es muy sencilla, apenas tiene dos cuestas un poco empinadas que pueden salvarse si vas por otros caminos. Es apta tanto para hacerla con niños como con personas mayores, ya que los caminos están bien señalizados y discurren por caminos de tierra y asfaltados.
Vistas a lo largo de la ruta
Para llegar a la Cascada del Hervidero debes bajar unas escaleras de hormigón y tiera bastante empinadas y sin protección alguna, pero si no puedes o quieres bajar por miedo, podrás también admirar desde lo alto del puente que hay justo antes de las escaleras.
La ruta es de unos 4 km en línea pasando por las dos cascadas: la Becerra, a mitad de camino, y, como parada final, la del Hervidero. Es decir, que la ruta en total es de 8km, ida y vuelta; algo más si da una vuelta por la parte izquierda de la Cascada del Hervidero para verla desde arriba, esto es opcional, te lo contamos dentro de la ruta.
A lo largo de toda la ruta te encontrarás con explanadas donde podrás descansar o montar un picnic con la familia y/o amigos. Además, cuenta con zonas de sol y sombra, pero te aconsejamos que si hace un día soleado vayas con protección solar, ya que la mitad del camino discurre sin sombras donde cobijarse.
La ruta sigue el cauce del río Guadalix, por lo que no tiene pérdida, solo tienes que buscar el sonido del agua bajando para ir tanto a las cascadas como al punto de inicio.
Río Guadalix
Por último, estás en el campo, por favor, llévate contigo la basura, puede que encuentres un contenedor de basura cerca de la Cascada del Hervidero, pero no siempre está, así que llévate una bolsa para recoger tus residuos y dejarlos en el punto de partida de la ruta.
¿Cuándo es la mejor época para ir a la Cascada del Hervidero?
La mejor época es el deshielo, a comienzos de la primavera para ver las cascadas con un gran cauce, pero si tanto vas en invierno o en verano siempre las verás con agua, no se seca apenas en todo el año, así que no tendrás problemas en cuanto a cuándo ir.
¿Cómo llegar?
Si vas en coche, lo mejor es que dejes el coche en esta ubicación. Aquí encontrarás sitio casi siempre. En los fines de semana puede costar un poco aparcar, pero en el polígono industrial, en calles paralelas, verás algún hueco para dejar el coche. Desde este punto verás un pequeño parque y el río Guadalix, solo tendrás que seguir el río arriba para comenzar la ruta.
Punto de partida de la ruta
Si vas en transporte público, puedes coger desde el Intercambiador de Plaza de Castilla el bus número 193 y bajarte en la parada “Polígono Industrial Norte”. Desde aquí verás el supermercado Día y a mano izquierda el parque desde donde parte la ruta.
Ruta
Como ya hemos hablado, la ruta parte del parque o zona de picnic que hay en el polígono industrial norte, desde aquí verás el río Guadalix que en este tramo queda a la izquierda y tendrás que ir subiendo hasta encontrar un puente de madera por el que deberás cruzar.
Zona de picnic o punto de aparcamiento
Una vez cruzado el puente de madera verás una senda de tierra bien marcada y comenzarás a ver explanadas de césped para poder pararte siempre que quieras. Te recomiendo que, siempre que puedas, te acerques al río Guadalix y veas como baja el río.
Ruta paralela al Río Guadalix
¡Ojo! no está permitido el baño tanto en el río como en las cascadas, por lo que si hace calor, no te sientas tentado a meter los pies en remojo. Mejor busca una sombra y bébete ese refresco que trajiste de casa.
Cascada Becerra
Para ir a la Cascada Becerra, que queda a mitad de camino entre San Agustín del Guadalix y la Cascada del Hervidero, nuestro punto final, deberás coger siempre los caminos de la derecha en todas las bifurcaciones que te encuentres. Irás lo más paralelo al río Guadalix.
Río Guadalix
Antes de que te des cuenta, en este paseo tan relajado y tranquilo, sin esfuerzo alguno te verás bajando pequeñas pendientes hasta encontrarte con varias rocas de granito donde te encontrarás detrás de ellas la Cascada Becerra. Este pequeño salto de agua que prácticamente puedes llegar a tocar, de lo cercano que se encuentra desde la orilla.
Cascada Becerra
Una vez admirado este pequeño salto puedes continuar hasta la Cascada del Hervidero por el mismo sendero. Llegarás a un punto donde se corta el camino pero a tu izquierda encontrarás unas pequeñas escaleras excavadas en la arena. Si te cuesta subir estas escaleras, puedes volver sobre tus pasos hasta el último cruce de tierra y continuar por los caminos. Desandarás como mucho unos 100 metros.
Cascada del Hervidero
Una vez en el sendero principal de tierra tendrás que seguir hacia la derecha. Llegarás a una pista de asfalto, en este cruce gira a la derecha, cuesta abajo. Al final del camino cruzarás un puente que te lleva hasta la otra orilla del río Guadalix. Pasado este puente el camino gira a la izquierda, cuesta arriba.
Puente hacia la cascada
Sigue este camino de tierra de nuevo, pasado unos 20 metros verás un caminito a la izquierda en una casita de granito, no lo cojas, sigue ascendiendo un poco más hasta una baliza de paso blanca y roja. En este punto pasa esa baliza y verás un camino a la derecha, desde aquí volverás a escuchar el río e irás en paralelo de nuevo hasta la Cascada del Hervidero.
Baliza por la que debes pasar
En este paseo hasta la cascada irás flanqueado por una naturaleza cambiante a lo largo del año, puedes encontrarte encinas, pinos, jaras, lavanda, etc. un festival de colores y olores diferentes dependiendo de la estación en la que vayas.
Sabrás que habrás llegado a la Cascada del Hervidero cuando veas un puente de piedra, casi como un acueducto con una cadena que impide el cruce. Un poco más adelante, el camino de arena se acaba y verás unas escaleras de tierra y piedra que descienden hasta la cascada.
Puente de piedra
Ten cuidado, estas escaleras son muy estrechas y empinadas. Si hay mucha gente deberéis hacer turno de subida y bajada, ya que dos personas no entran en la escalera. Además, no tiene pasamanos y da un poco de vértigo ver la caída que hay hasta abajo.
Escaleras de bajada a la cascada
Una vez abajo, tendrás ante ti la Cascada del Hervidero. Antiguamente, podías bañarte en esta cascada, pero ahora está prohibido. Disfruta del sonido del agua y del salto tan bonito que es la Cascada del Hervidero.
Cascada del Hervidero vista desde abajo
Una vez acabada la ruta, vuelve sobre tus pasos para acabar con esta visita a la Cascada del Hervidero. Volverás al punto de partida habiendo visto dos preciosas cascadas a un paso de Madrid.
Otras vistas
Si no quieres bajar las escaleras porque haya mucha gente, eres mayor, vas con bebés o tienes vértigo, en el mismo puente de piedra con una cadena, puedes ver la cascada desde arriba. Estará tapada con algún árbol que otro, pero podrás verla perfectamente.
Cascada desde el puente de piedra
Otra vista de la Cascada del Hervidero está en su parte más alta, el empiece. Para ello, una vez subas las escaleras, puedes cruzar andando el puente de piedra. Desde ahí sale un pequeño sendero, donde apenas cabe una persona, que te llevará a la parte más alta de la cascada.
Vista de la cascada desde su empiece
Ten cuidado si la tierra está mojada, ya que puede resbalar. Igualmente, cuando llegues al empiece de la cascada, ten cuidado con el granito, ya que puede resbalar y puede causar un accidente. Si vas con niños, no les dejes sueltos para evitar problemas.
Mapa
Dónde comer
Si no quieres hacer picnic y quieres darte un homenaje al terminar esta ruta. Puedes ir a comer a alguno de los buenos restaurantes que tiene San Agustín del Guadalix. Bares y restaurantes tienes muchos, pero uno de los más famosos es el Caserón de Araceli.
Un restaurante de comida castellana, en el que es necesario hacer reserva y donde podrás disfrutar de una carne excelente de la Sierra de Guadarrama. Eso sí, prepara el bolsillo ya que el precio medio oscila entre 30-35€ por persona. Un broche redondo para esta ruta de cascadas cerca de Madrid.
Ahora que las limitaciones para viajar no nos dejan ir muy allá, las escapadas románticas, viajes de aniversario u ocasiones especiales se vuelven muy reducidas. Pero en España contamos con lugares muy románticos para compartir con esa persona tan especial; sitios con encanto donde disfrutar de la naturaleza, de la gastronomía o de la cultura tan variada que tenemos en España. En este post te contamos 5 viajes en pareja para hacer por España para que no se apague la chispa del amor en tiempos de COVID.
Galicia
Miradores para enamorarse
¿Viajes en pareja por España con mar, paisajes preciosos, buena comida y vino? ¡Eso es Galicia! Para un viaje exprés por Galicia, te recomendaríamos mil sitios, pero destacamos las Rías Baixas.
Te recomendamos que hagas una ruta de miradores por la zona de Pontevedra y Vigo. Degusta la gastronomía gallega en un furancho sin más pretensiones que servirte productos de buena calidad a buen precio. Descubre alguna de sus islas llenas de naturaleza o disfruta de las decenas de playas que hay en esta zona, algunas consideradas las mejores del mundo.
Una buena base para hacer esta escapada romántica sería alojarte en Sanxenxo, desde aquí podrás descubrir las Rías Baixas y sus pueblos de los alrededores. Cambados, isla de La Toja, Combarro, isla de Arousa, San vicente do Mar o el O Grove no pueden faltar para sorprender a tu pareja.
Si tienes tiempo, no te olvides de pasear un día por Pontevedra, una ciudad con cientos de plazas preciosas, con un ambiente acogedor y donde podrás ver un pedacito del Camino de Santiago.
Cáceres
Descubre Cáceres de noche
Cáceres es perfecta si quieres un fin de semana relajante, con buena comida y desconectar paseando por callejuelas sin rumbo. Es un destino muy romántico para pasar con tu pareja.
En dos días en Cáceres podrás descubrir uno de los mejores cascos históricos conservados de Europa que, además, ha sido escenario de infinidad de películas y series de todo el mundo. No te pierdas el segundo aljibe más grande y mejor conservado del mundo (después del de Estambul) dentro del Palacio de las Veletas. ¡Ah! y descubre diversas leyendas de la ciudad con un tour de leyendas nocturno, será un fin de semana redondo.
Además, la gastronomía cacereña está a la altura de las grandes ciudades de España, redescubre el tapeo aquí y degusta productos de alta calidad en buena compañía. Presa ibérica, Torta del Casar, jamón de bellota, migas o pestiños son algunos de los platos que no puedes perderte en tu visita a esta preciosa ciudad.
¿Quieres más? Si todavía tienes tiempo y fuerzas, a 40 minutos tienes uno de los pueblos más bonitos de España, Trujillo, su casco histórico en el punto más alto del pueblo es un entramado de calles e iglesias culminado con su castillo desde el que poder ver a kilómetros a la redonda.
Cuenca
En Cuenca encontrarás una escapada en pareja por España relajada, por una ciudad que invita a que la recorras a pie y descubras sus callejones. Más allá de sus famosas casas colgantes, también debes visitar su Catedral, la Plaza Mayor o las ruinas de su castillo.
¿Quieres tener dos magníficas vistas de la ciudad? Entonces no debes perderte estas dos opciones: con la primera disfrutarás, al completo, de sus de sus casas colgantes; para llegar a ella debes cruzar el Puente de San Pablo e ir hasta el Parador de Cuenca. Con la segunda, podrás ver a vista de pájaro el casco histórico de Cuenca, tendrás que subir hasta las ruinas del Castillo de Cuenca para contemplarla; te recomendamos que vayas al anochecer y ver la puesta de sol desde aquí.
Además, no puedes perderte estas dos visitas en tu escapada romántica a Cuenca: La Ciudad Encantada, a 30 minutos de Cuenca la entrada cuesta 5€ esta visita no te llevará más de 1 hora, ya que el recorrido son 3 km en un sentido; y el Nacimiento del Río Cuervo, con sus cascadas de cuento. Llegar al nacimiento desde Cuenca te llevará hora y media, pero merece la pena hacer una ruta de senderismo por la sierra de Cuenca y ver estas cascadas tan románticas.
Navarra
Un entorno mágico
Si te gusta la naturaleza está claro que el norte es lo tuyo. Si buscas viajes en pareja por España de fin de semana a todo color debes ir a la Selva del Irati. Es el segundo hayedo más grande de Europa, por detrás de la Selva Negra, pero nada tiene que envidiar.
En la Selva del Irati, especialmente si vas a finales de octubre, disfrutarás de un festival de colores ya que las hayas empiezan a cambiar de color, verdes, amarillos y marrones tiñen todos los paisajes y empiezan a llover hojas a tu alrededor. Perfecto para relajarse en pareja.
Puedes hacer varias rutas dentro de la Selva del Irati o puedes descubrir otros paisajes tan bonitos y mágicos como el parque del Quinto Real o el Valle de Sorogain. Dentro del parque Quinto Real puedes visitar la Real Fábrica de Armas de Eugi abandonada e invadida por la naturaleza, un sitio con mucho encanto. Además, si quieres puedes cruzar la frontera con Francia e ir a visitar un pueblecito precioso llamado Urepel.
Si tienes tiempo, déjate caer por Pamplonay disfruta de su centro, de sus famosas calles y no pases por alto el hacer una ruta de tapas por sus bares con pintxos muy elaborados y riquísimos.
Segovia
Para disfrutar de la tranquilidad
Más allá de la capital de provincia, si buscas viajes en pareja por España para desconectar en plena montaña te recomendamos la ruta de los pueblos de colores, cerca de la estación de esquí de La Pinilla, a unos 100 km de Segovia.
Esa ruta de pueblos de colores se compone de 8 pedanías pertenecientes al Ayuntamiento de Riaza y se caracterizan por sus colores tan llamativos de sus casas: rojas, amarillas y negras. Deben esos colores tan bonitos a los materiales utilizados para su construcción, cuarcitas, arcillas y pizarra son los principales materiales que abundan en la zona.
Los colores inundan todo desde las casas, las iglesias, hasta el suelo y los carteles de las calles. Todo es o rojo, amarillo o negro.
Aquí podrás relajarte con tu pareja descubriendo estos pueblos tranquilamente, ya que apenas hay visitantes. Los hoteles de la zona son pequeños y preciosos. Si te decides a realizar esta ruta debes ir a comer a la Pizarrera, un restaurante que va cambiando su carta en función de la temporada y con unos ingredientes de primera calidad.
También tienes rutas dentro de la Sierra Ayllón para desconectar todavía más y descubrir cascadas tan bonitas como la de la Chorrera.
El segundo hayedo más grande de Europa es todo un espectáculo de la naturaleza en cualquier época del año. Aunque su máximo esplendor lo tiene en otoño, cuando se produce el cambio de hoja y toda la Selva se tiñe de color. Merece, al menos, pasar un día en la Selva de Irati para enamorarte del otoño y la tranquilidad de este lugar.
Musgo y hayas son los habitantes de Irati
Si te escapas un fin de semana a Navarra, no desperdicies la oportunidad de conocer la Selva del Irati, así como otras zonas tan bonitas con Quinto Real o la Real Fábrica de armas de Eugi o Sorogain.
¿Cómo llegar a la Selva del Irati?
Para llegar a la Selva de Irati puedes hacerlo de dos formas. Existen dos entradas a la Selva, una está en Orbaizeta y la otra en Ochagavía. Ambas entradas cuentan con parking tanto para caravanas como para coche.
Rutas con encanto
Jugando con las hojas
Existen varias tarifas para poder acceder al parking de la Selva del Irati que van desde 1€ por moto hasta 5€ por coche. No hace falta reservar plaza de aparcamiento como pasa en otros hayedos, pero sí que te recomiendo que llegues pronto.
Por dos razones: disfrutar de la soledad del parque hasta que lleguen grupos varios y la otra razón es porque, al menos en la entrada de Orbaizeta, existe un parking superior que te lleva hasta la Presa del Embalse de Irabia, que tiene plazas limitadas. Este parking te deja unos 3 km más adentro de la Selva y desde este parking salen más rutas. Por no decir, que la carretera es preciosa.
¿Qué llevar?
Dependerá mucho de la época en la que vayas, por supuesto, pero no te olvides nunca de llevar siempre contigo para pasar un día en la Selva del Irati:
Las telas de araña hacen magia
Calzado y ropa cómoda: a poder ser siempre botas de montaña o senderismo, puedes ir en deportivas, pero es un sitio especialmente húmedo y cuando las hojas se han caído puede provocar resbalones y algún susto. Así que lleva calzado que agarre bien. En cuanto a la ropa, mejor que sea impermeable, por lo menos un chubasquero y que abrigue, que estamos en los Pirineos.
Comida: la ruta que elijas por pequeña que sea te llevará más tiempo del normal. ¿Por qué? porque estás dentro de un bosque casi mágico, hará que se te pasen las horas volando y no pararás de hacer fotos a cada rincón, porque todo es precioso. Así que llévate comida para hacer un picnic y frutos secos por si te apetece picar algo.
Una pequeña bolsa: para llevarte todo lo que has traído contigo, es decir, la basura. No hay cubos de basura en toda la Selva, por lo que te tendrás que llevar hasta el parking todos tus residuos.
Rutas de la Selva del Irati
Existen hasta 16 rutas señalizadas para pasar varios días en la Selva del Irati, existen dos tipos de rutas: las rutas del valle Aezkoa, que se entra por Orbaizeta y las del valle de Salazar, que se llega por la entrada de Ochagavía.
Mires a donde mires es un espectáculo de color
Hay rutas para todos los gustos y todas las edades, pueden hacer estos senderos desde niños o expertos senderistas. En algunos de ellos hay pistas por las que puede ir un carrito de bebe, pero si vas con pequeños, será más cómodo que vayas con un portabebés.
En ambas entradas hay un puesto de información donde puedes preguntar por la ruta más adecuada para el tiempo y el tipo de senderistas que seáis, os darán un mapa gratis y os indicarán el empiece de la senda.
Rutas paralela al embalse
Si solo tienes un día para disfrutarla, te recomendamos que hagas la ruta que da la vuelta al embalse de Irabia. Nosotros realizamos esta ruta y disfrutamos de varios atractivos de la Selva, desde sus profundidades, repletas de musgo, rocas y hayas rojas, el embalse con una luz preciosa (aunque a la mitad), puentes medievales y miradores con unas panorámicas envidiables. Todo un espectáculo lleno de color y silencio solo interrumpido por las hojas cayendo a nuestro paso.
Nuestra ruta
Caminos para todos los gustos
Nuestra ruta de un día en la Selva del Irati comenzó en el parking de la presa de Irabia, por la entrada de Orbaizeta, llegamos pronto y pudimos subir hasta el parking 3 que te deja en la misma presa.
Si cruzas el puente de la presa ahí comienza las indicaciones de la senda SL-NA-50C llamada Plaza Beunza. Esta ruta es circular y dura 5 km, lo que hicimos para continuarla alrededor del embalse, fue seguir la senda paralela al embalse, ya que esta ruta gira a la derecha y se aleja para volver al punto de inicio.
El embalse de Irabia casi seco
No te preocupes, no te perderás ya que está todo señalizado y hay caminos por todos lados. Si sigues recto, llegarás a la parte más estrecha del embalse y verás un puente para cruzar de lado y hacer la ruta de vuelta.
Una vez que cruces y vayas de vuelta te incorporarás a la senda SL-NA-54C, llamada Los Paraísos-Erlan, puedes coger y seguir esta ruta para hacer un par de kilómetros más o puedes ir en dirección contraria a las flechas y llegarás al parking, siempre bordeando el embalse.
Adentrándonos en Irati
Esta ruta nos llevó un día entero por la Selva del Irati, parando a comer y paseando de forma relajada, tomando fotos y descansando para contemplar las vistas. En total fueron unas 6 o 7 horas recorriendo unos 13 km de recorrido.
¿Qué ver en los alrededores de la Selva del Irati?
Si tienes pensado pasar más de un día por los alrededores de la Selva del Irati puedes realizar diversas actividades como visitar otros paisajes naturales, cruzar la frontera o visitar la cuna de los encierros.
Valle de Sorogain
Otros entornos naturales de la zona que no puedes perderte es el parque del Quinto Real, un hayedo con un aspecto de bosque encantado que tiene varias rutas de senderismo para disfrutar del entorno. Dentro del parque de Quinto Real tienes la Real Fábrica de armas de Eugi, ahora abandonada y poblada por la naturaleza, todo un espectáculo.
Otro entorno natural que no puede faltar en tu viaje a la Selva de Irati es el valle de Sorogain. Este valle no puede ser más verde, aquí podrás pasear entre vacas y caballos pastando a lo largo de los senderos. Una combinación de colores perfecta que se culmina con el agua celeste del río que discurre por el valle.
Real Fábrica de armas de Eugi
Si en cambio quieres visitar algo más urbano, tienes que ir a Pamplona, su casco histórico está lleno de plazas y calles que las reconocerás de la televisión. No puedes pasar por alto el entrar a la Catedral de Pamplona, es gratuita, y ver su columbario, un cementerio que se ubica en el claustro de la Catedral que enmarca un patio precioso, como si de una joya oculta se tratara. ¡Ah! y disfruta de sus pintxos en sus bares y tabernas, no te arrepentirás.
Uno de los dilemas a la hora de viajar es dónde comer, y en Cáceres se hace más difícil todavía. La gastronomía cacereña se ha modernizado con los años y ha sabido sacar más partido, aún, a los sabores tradicionales de la comida cacereña. Con sus productos típicos, como el jamón, la Torta del Casar y el pimentón de la Vera han conseguido evolucionar platos tan tradicionales como las migas.
En nuestra escapada de fin de semana a Cáceres pudimos descubrir varias joyas escondidas en los alrededores del casco monumental que pusieron el broche de oro a nuestra experiencia en la capital de Extremadura. ¿Quieres ver dónde comer en Cáceres y no arrepentirte? Sigue leyendo…
Tapear en Cáceres
Antes de descubrirte en qué restaurantes disfrutarás más, queremos contarte qué es lo típico en Cáceres a la hora de comer. En Cáceres encontrarás principalmente tapas, pero no tapas pequeñas y nada elaboradas. Al contrario, en algunos sitios pueden ser verdaderas obras culinarias y en otras la cantidad puede ser tan grande como una ración para dos.
Las migas extremeñas nunca pueden faltar
De entre todas las tapas que hemos probado en España, las tapas de Cáceres podrían tener la complejidad de las degustadas en Bilbao o San Sebastián y pueden llegar a ser tan abundantes como las que sirven en Galicia o en Cádiz.
Te recomendamos que preguntes antes de pedir y dejarte llevar por los nombres tan suculentos que tienen que preguntes si la cantidad está bien o si se pueden pedir mitades, para que llegues con hueco para el postre.
La cacharrería
Fachada de La Cacharrería
En pleno casco monumental, entre el Palacio de los Golfines de arriba y la Casa del Sol, se encuentra este escondido restaurante, apenas visible desde fuera. Pero una vez pasas su patio interior, te espera una casa restaurada de estilo clásico con antigüedades combinadas con sus llamativos loros colgados de sus preciosas arañas de cristal.
Hummus libanes
Croquetas de patatera
En La Cacharrería fusionan ingredientes de primera calidad de la tierra con técnicas modernas. Su carta se compone de tapas con un toque internacional pero en las que predominan los sabores de Extremadura.
De entre todas las tapas fantásticas que tienen, te destaco dos que nos sorprendieron y que no debes dejar escapar: las croquetas de patatera y las puntas de solomillo (de cerdo) con torta del Casar.
Puntas de solomillo con Torta del Casar
Mousse de chocolate
Para dos personas pedimos cuatro tapas (más la que repitió Sergio) y una mousse de chocolate. Para tener una referencia de precios, las tapas varían entre 4€ y 6€, ¡no está mal!
Mastropiero
Interior de Mastropierto
También ubicado dentro de la zona monumental y cerca del barrio judío esta este gastrobar moderno con un patio precioso donde puedes tomarte una copa después de cenar.
Aunque veas apariencia de bar o discoteca, no dejes de entrar y disfrutar de una gran comida. En Mastropiero realizan platos con productos típicos extremeños combinados con ingredientes y técnicas más exóticas o asiáticas. Además, la carta viene con fotos de los platos, lo que hace más difícil la elección ¡por la pintaza que tiene todo! Aquí los platos son raciones que, en algunos casos, puedes pedir la mitad para poder probar más variedad.
Croquetas Mastropieras
Gyozas de cordero
De entre los platos que escogimos, después de estar un buen rato pensándolo, nos decidimos por Croquetas Mastropieras, de Torta del Casar y trufa, Gyozas de cordero y Carrillera de ternera. Aunque las gyozas sean de cordero, no tienen ese sabor intenso, ni repiten, y eso que las comimos por la noche. Es uno de los platos más impresionantes que hemos probado…
Carrilera de ibérico
Tarta de queso
Y para rematar… La tarta de queso está espectacular, nada que ver con otras probadas, ni en sabor, ni en presentación, donde no reconocerás una tarta al uso.
Los platos van desde los 8€ hasta los 15€ aprox. y muy bien gastados tanto por la comida, como por el sitio y el trato recibido.
Atrio
Entrada a Atrio
¿Quieres experimentar el comer en un restaurante de dos estrellas Michelin? Y si te digo que en Cáceres puedes hacerlo por ¿unos 60€ por persona? Vale, es más caro de lo normal, pero un dulce de vez en cuanto no amarga a nadie, no?
En pleno casco histórico se encuentra Atrio, su ambiente elegante y relajado invita a disfrutar de la experiencia al completo. Además, cuenta con una de las bodegas más grandes de España con casi ¡40.000 referencias de vinos!
Si bien no pudimos ir a Atrio por no tener reserva, nos lo guardamos para la siguiente vez que visitemos Cáceres. Y si no hemos ido, ¿por qué recomendarlo? Varios amigos y familiares han ido a Atrio y nos han dicho que es el mejor restaurante de Cáceres y para darte un homenaje, así que no hagas como nosotros, y haz tu reserva antes de ir a visitar Cáceres.
Plaza de San Juan
Si quieres ser un cacereño más, tienes que ir a los bares de la Plaza de San Juan, aquí hay varias taperias donde podrás ir de ruta y probar lo mejor de cada casa.
En estas taperias encontrarás diversas tapas más sencillas y también tostas para compartir. Lo mejor, el ambiente que puedes encontrarte el fin de semana ya sea a la hora del vermut o en la cena, donde hay gente local, joven especialmente, dentro y fuera de los bares, si el tiempo acompaña.
Si buscas donde comer con amigos en Cáceres y disfrutar mezclándote con los cacereños este es tu sitio que no debe faltar en tu escapada.
¿Dónde no comer en Cáceres?
Plaza Mayor de Cáceres
No queremos causar revuelo con este apartado pero tenemos dos recomendaciones para NO comer en Cáceres, una nos la recomendaron desde el hotel que estuvimos y otra la probamos nosotros, y no se lo recomendamos a nadie, os cuento.
Desde el hotel nos recomendaron no parar por ninguno de los restaurantes que hay en la Plaza Mayor, más allá de una caña para disfrutar del ambiente y de las vistas a la muralla y la puerta de la estrella, estos restaurantes no son los mejores para comer. Como suele pasar en todas las plazas mayores, estos restaurantes suelen ser más caros y más turísticos. Están masificados y la calidad es normal.
En cuanto a otra recomendación para NO ir a comer en Cáceres, es un restaurante que nos recomendó nuestra guía de Civitatis, que si fue una gozada hacer con ella dos tours, nos indicó unos cuantos sitios a donde ir y nos decantamos por uno cerca del hotel. El 8º arte, más allá de su apariencia de bar normal, no lo recomendamos porque la comida no estaba bien hecha, lo que nos produjo una gastroenteritis…Pedimos unos huevos rotos que casi nos viene la gallina encima de las patatas, de lo poco hechos que estaban. Por si fuera poco, la limpieza del sitio no era muy buena, estuvimos incómodos todo el rato. Ten cuidado si vas a este bar.
Migas
Así que os invito a evitar estos dos lugares y disfrutar de unas buenas experiencias culinarias en Cáceres que tanto tiene que sorprendernos y enseñarnos.
La ruta de los pueblos de colores de Segovia se compone de 8 pueblos a lo largo de la carretera CV-111 desde Riaza. Es una buena ruta para hacer un día si estás buscando una excursión desde Madrid diferente, ya que solo está a hora y media de la capital; algo que hacer si estás en la Estación de ski de la Pinilla, que está a 15 minutos en coche o una ruta que hacer desde Riaza; pueblo del que dependen todos estas pedanías.
8 pueblos de colores de Segovia
Estos pueblos se clasifican en tres colores: amarillo, rojo y negro. Deben estos colores tan llamativos a los colores de las piedras de los alrededores con los que se construyeron sus casas antiguamente. Pizarras, arcillas y cuarcitas son los materiales con los que se construyeron estos 8 pueblos de colores de Segovia.
Un consejo, no te agobies por los tiempos o por no encontrar grandes puntos turísticos o históricos. Primero porque ver los 8 pueblos en un día es posible y, segundo, porque si gran atractivo turístico son ellos mismos, recorrer tranquilamente sus calles y disfrutar de su silencio y sus colores tan particulares. ¿Quieres descubrirlos en un día?
Pueblos Amarillos
La soleda de Alquité
Alquité
El pueblo más pequeño de la ruta. Son solo cuatro calles y no llegará a tener más de veinte casas en total. Solo tiene cuatro habitantes y suerte si te encuentras con ellos en la calle. Aún así merece la pena visitarlo para ir introduciéndote en la tranquilidad que respiran estos pueblos.
Iglesia San Pedro de Alquité
En todos los pueblos te encontrarás con dos puntos en común: la iglesia y el teleclub, taberna o bar (nunca faltan en un pueblo español). La Iglesia de Alquité es San Pedro de Alquité y es de estilo románico, si te encuentras con algún vecino puede que te abran la iglesia para verla por dentro.
Calles amarillas
Rincones de Alquité
Martín Muñoz de Ayllón
Calles de Martín Muñoz de Ayllón
Lo primero de todo, está prohibido aparcar dentro del pueblo. A la entrada del pueblo cuentan con un parking gratuito, desde ahí, tardarás 5 minutos andando hasta la Plaza Mayor del pueblo.
Iglesia de San Martín de Tours
Dentro de los pueblos de colores de Segovia, Martín Muñoz de Ayllón es uno de los más bonitos. Está siendo bastante rehabilitado y pasear por él y tener la sierra a dos pasos la hacen un enclave perfecto para desconectar. Las vistas de toda la sierra de Ayllón desde la Iglesia de San Martín de Tours es lo más especial del pueblo, más allá de sus preciosas calles.
Entrada a Martín Muñoz de Ayllón
Si tienes tiempo, puedes hacer un par de rutas de senderismo por la zona, una de ellas va a la cascada de la Chorrera y la otra por el collado de las cabras, de interés natural.
Pueblos Rojos
Madriguera
Madriguera y sus rincones
El más grande de todos los 8 pueblos de colores de Segovia. Llegó a tener 750 habitantes. También es el mejor conservado de todos y cuidado. Es uno de los dos pueblos que vimos con restaurante, y al estar en el medio de la ruta fue donde paramos a comer.
Lo mejor que puedes hacer es perderte por sus calles, descubrir rincones por doquier, ver su biblioteca por fuera y tratar de descifrar el letrero que reza el cementerio.
Debes dejar el coche en el parking gratuito que está en la parte trasera de la Iglesia de San Pedro de Madriguera.
La tranquilidad de Madriguera
Villacorta
Iglesia de Santa Catalina
Es uno de los pueblos más rojos de toda la ruta. Tanto sus calles como sus casas están realizadas en arcilla roja de los alrededores que les da ese color característico. Aquí la iglesia del pueblo es la Iglesia de Santa Catalina de Villacorta.
Villacorta
En Villacorta también puedes ver un puente romano y si quieres desconectar, puedes quedarte a dormir o comer en un molino rehabilitado a las afueras del pueblo.
Si te vas fijando en todos los pueblos, según el color que sea el pueblo, así son las calles y los carteles de las calles; verás las calles rojas, amarillas y negras.
El Negredo
Plaza de El Negredo
Este es el último pueblo de la ruta de los 8 pueblos de colores de Segovia y la guinda perfecta a este día.
Lo peculiar de este pueblo es que dentro de él tienen una ermita y, a las afueras, en una colina, tienen la Iglesia de la Virgen de Vallehermoso. Si tienes tiempo sube a verla y verás que desde su pórtico sale un árbol. Además, no puedes pederte su plaza mayor, es preciosa.
Casas de cuento
Pueblos Negros
Becerril
Las calles siempre del mismo color que las casas
Será el primer pueblo negro que veas en esta ruta de pueblos de colores de Segovia. Es muy pequeñito, consta apenas de 10 calles. Y como es normal en estos pueblos, el centro es la iglesia del pueblo. Aquí la iglesia se llama Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. En todos estos pueblos las iglesias están cerradas y tendrás que pedir permiso para poder verlas.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
La carretera de entrada y la llegada al pueblo es muy bonita, rodeada de naturaleza, al torcer una curva te encontrarás con el pueblo como si apareciera de repente salido de la nada. Te recomiendo que aparques el coche justo en la fuente de la entrada, ahora seca y vayas a pie por el resto de Becerril.
Serracín
Anclado en el tiempo
A más de 1200m de altura, estos 8 pueblos de colores de Segovia parece que se hayan paralizado en el tiempo. Sus calles empedradas vacías y rehabilitadas parece que hubieran estado así siempre.
Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad
Los nombres de las calles del mismo color que las casas
En Serracín podrás ver los restos de su Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad, podrás identificar dónde estaba el altar y a su espalda, verás el antiguo cementerio.
Desde aquí tienes unas vistas preciosas y puedes ver algunos de los pueblos de esta ruta, como Madriguera, Becerril, Villacorta o El Muyo.
Detalles de Serracín
El Muyo
El pueblo negro más grande
El pueblo negro que más nos gustó y el más grande de los pueblos negros de Segovia. Pasear por sus calles es como pasear por tuneles negros sin techo y, sin darte, cuenta apareces en medio del campo verde. Un contraste muy bonito.
Casitas rehabilitadas
Aquí la pizarra cubre tanto las fachadas de las casas, los tejados, la Iglesia de San Cornelio y San Cipriano y las calles.
Su taberna tiene un merendero con unas vistas preciosas a la sierra de Ayllón. Te recomiendo que te sientes y escuches el silencio que inunda estos pueblos.
Iglesia de San Cornelio y San Cipriano
Callejones con encanto
¿Dónde comer?
A lo largo de esta ruta de los 8 pueblos de colores de Segovia pudimos ver 4 o 5 restaurantes en total. Nosotros elegimos comer en Madriguera por ser la mitad del recorrido y aquí solo está el restaurante La Pizarrera.
Croquetas caseras
Tomate negro
Un restaurante con ingredientes de la zona que cambia su carta según la temporada. Una antigua casa restaurada te ofrece un ambiente moderno y tradicional donde prima la tranquilidad que rodea a todos estas pedanías.
Presa ibérica
En La Pizarrera puedes comer productos típicos de la huerta y carnes de la sierra hechas a la piedra en brasas con pizarra.
No puedes irte de aquí sin probar los tomates negros, que saben realmente a tomate; las croquetas caseras o las carnes a las brasas con un sabor y una textura a la altura de muchos restaurantes de postín.
¡Ah! y los postres… todos caseros, en especial la mousse de chocolate, para los amantes del chocolate puro y la tarta de queso super cremosa.
Cáceres bien merece una escapada de fin de semana. En ella podrás recorrer una ciudad monumental, de las mejores conservadas de Europa y, a la vez, descansar, relajarte y coger fuerzas con una gastronomía a la altura de las grandes ciudades. ¿Quieres saber qué ver en Cáceres en un fin de semana? Sigue leyendo…
Palacio de las Veletas
Proclamada ciudad por Alfonso XII en un despiste, y gracias al tren, Cáceres está repleta de rincones por descubrir, con leyendas para no aburrir a nadie y puede sentirse orgullosa de su patrimonio, aun no siendo reconocida como una de las ciudades más bonitas de España (y lo es).
Si quieres descubrir Cáceres en dos días te enseñamos los puntos clave que no debes perderte en tu visita exprés.
Plaza Mayor
Plaza Mayor
De forma alargada, conecta el conjunto histórico con la parte de extramuros de la ciudad. Es el punto ideal para comenzar tu fin de semana en Cáceres. En sus soportales se encuentran una decena de bares y restaurantes con terrazas con vistas a la muralla.
Las famosas letras de Cáceres
En la parte sur de la plaza encontrarás sus famosas letras desde donde podrás hacerte una foto de postal.
Arco de la Estrella
Interior Arco de la Estrella
Es la entrada más concurrida para acceder a la ciudad monumental, también conocida como la Puerta del Oeste. Tiene unas cuantas peculiaridades y es que si te fijas su paredes no son rectas, están giradas para que dejen pasar el ganado y los carruajes de antaño. Por la parte interna se encuentra un farolillo con forma de estrella. Pero no es por ello que debe su nombre la puerta, si no la Virgen de la Estrella ubicada en un templete.
Arco de la Estrella
Levantada por Larra de Churriguera, quiso dejar su huella en ella. Si te fijas detrás de la Virgen encontrarás un escrito por él, aunque no podrás descifrar lo que dice, ya que quien esculpió el texto en la piedra, no sabía leer ni escribir y lo puso tal cual, por lo que el texto está al revés, de izquierda a derecha y de abajo arriba.
Torre de Bujaco y muralla
Torre Bujaco desde la muralla
Es una de las tres torres de estilo árabe que sigue en pie en Cáceres. Destaca sobre sus hermanas, la Torre de la Yerba y la Torre del Horno, aunque son del mismo estilo. La Torre Bujaco, que debe el nombre a su constructor el califa Abu Ya’qub, está adornada con un balcón del siglo XVI y sus torres están culminadas por almenas.
Lo que más nos gustó fue subir a ella. Desde lo alto de la torre tienes unas panorámicas preciosas de toda la ciudad amurallada, la Plaza Mayor y se puede ver hasta el Santuario de Nuestra Señora de la Montaña. La entrada cuesta 2,5€ por persona y también permite recorrer el único tramo abierto al público de la muralla original.
Restos de la muralla desde la Torre Bujaco
Este tramo de no más de 100 metros de muralla, por el que pasas por encima del Arco de la Estrella, te lleva hasta el patio de un antiguo Palacio, convertido ahora en sede de un banco, y en el que en el subsuelo puedes ver restos de la antigua ciudad romana. Aquí podrás ver caballerizas, calles y el interior de algunas casas romanas.
Palacio y Torre de Carvajal
Patio del Palacio de Carvajal
Si quieres descubrir cómo es un palacio medieval, aquí puedes visitar la planta baja. Es la actual oficina de turismo de la provincia de Cáceres. En la entrada podrás ver una maqueta de la ciudad de Cáceres.
Si pasas hacia la derecha, llegarás al patio del palacio. Aquí es donde se alojaban los criados y personal del palacio en época de guerra. Todavía se puede ver en el suelo el sistema de recogida de agua que fluye hasta el aljibe situado debajo del patio (no visitable). En este patio, al fondo, encontrarás un mapa comarcal que indica las principales atracciones de Cáceres.
Higuera centenaria
Lo que más nos gustó del palacio, fue el jardín que tiene, donde se encuentra una higuera centenaria un tanto peculiar, debido a una enfermedad el tronco está retorcido y lleno de sarpullidos.
Si te has fijado en el exterior del palacio, observarás un balcón de arco de medio punto que servía para vigilar ambas calles ante posibles ataques, ¿y la torre? Es la única torre circular de todo Cáceres.
Concatedral de Santa María
Fachada Concatedral de Santa María
Una de las mejores vistas de la ciudad monumental que tendrás en tu fin de semana en Cáceres será situarse frente a la fachada principal de la Concatedral de Santa María. Desde aquí puedes ver varios edificios y plazas que hacen que te introduzcas de lleno en la época medieval.
Dentro de la Concatedral podrás subir al campanario y ver Cáceres desde las alturas, para ello, deberás pagar 5€. También podrás ver una de las capillas más famosas, la del Cristo negro, tallado en madera traía del norte de África. Este Cristo sale a procesionar, en total silencio, en la Semana Santa cacereña, pero nunca fuera de los muros de la ciudad monumental. Varias leyendas surgen a su alrededor y ninguna buena. Mejor tenerle respeto por si acaso…
Por último, reconoceréis la entrada principal de la Concatedral por haber aparecido en la serie española “Isabel” en el momento en el que la reina sale entronada.
Judería vieja
Emblema de las juderías
En Cáceres hay dos juderías, una dentro de la ciudad monumental y otra fuera. Ambas merecen un paseo dentro de lo que ver en Cáceres en dos días. Aunque puede que más encanto tenga la judería vieja. No esperes un barrio grande, solamente son un par de calles, que se diferencian del resto ya que en la placa del nombre aparece la estrella de David.
En el suelo la estrella de David
Estas calles se diferencian del resto de la ciudad monumental por ser estrechas y serpenteantes y las casas todas encaladas blancas a diferencia de los grandes palacios y casas de piedra de los alrededores. Dentro de este pequeño barrio, busca si puedes una casa con la puerta en azul, te transportará rápidamente a las fachadas de Santorini.
Palacio de las veletas
Balaustrada del Palacio de las Veletas
Es el actual Museo de Cáceres y es uno de los puntos fuertes que ver en Cáceres en un fin de semana, además…¡es gratis! Aunque su visita nos gustó más por otras cosas que por la historia que alberga.
La decoración de su exterior con esa balaustrada decorada es una preciosidad, aunque le falta lo que le dió el nombre en su día. Se llama el Palacio de las Veletas, ya que en la antigüedad, junto a la balaustrada, se situaban puntas de espada, que al pasar el aire entre ellas simulaba el sonido que producen las veletas.
El aljibe del Palacio de las Veletas
El otro atractivo de este palacio está en las profundidades del mismo. El segundo aljibe mejor conservado de Europa (el primero es la Cisterna de Estambul). Este aljibe, que todavía se puede visitar, recogía el agua suficiente para abastecer a toda la ciudad. Si tienes suerte y vas en días de lluvia, podrás verlo a pleno rendimiento, ya que sigue recogiendo el agua procedente del patio renacentista que lo cubre.
Santuario de Nuestra Señora de la Montaña
Santuario de Nuestra Señora de la Montaña
A las afueras de Cáceres, esta visita es mejor que lo hagas en coche, ya que para llegar al santuario hay unas cuestas importantes. ¿Por qué visitar este santuario? porque desde aquí tendrás una panorámica de la ciudad de Cáceres.
Desde aquí podrás ver la parte nueva de la ciudad y la ciudad monumental con los restos de la muralla que aún se conserva. Te aconsejo que vayas al atardecer para ver cómo se ilumina la ciudad amurallada y ver cómo se convierte en una ciudad de cuento.
Vista panorámica de Cáceres
La iluminación de Cáceres está muy cuidada, es una luz muy tenue, cálida que recrea cómo sería la ciudad en tiempos del medievo por la noche, y créeme, que consiguen esa ambientación perfectamente.
Casa del sol o de los Solís
Casal del sol
Lo que destaca de esta casa, actualmente habitada, es su fachada. A diferencia del resto de edificios de alrededor, este cuenta con un balcón desde el cual se oficiaban funerales cuando las iglesias no daban a basto en tiempos de guerras. Además si nos fijamos en la esquina de la casa podremos ver unos números que corresponden al inicio del cementerio intramuros de la ciudad de Cáceres.
Y es que el subsuelo del conjunto histórico de Cáceres es una gran tumba llena de cadáveres que pueden verse en algunas paredes reconstruidas.
¿Cómo puede ser esto? En 1755 el gran terremoto de Lisboa, se sintió en la parte más alta de la ciudad, dejando algunos edificios derrumbados. Cuando tuvieron que reconstruir parte de la ciudad, recogieron, literalmente, todo lo que encontraron en el suelo, y entre los restos habían huesos de las antiguas tumbas de la ciudad. A día de hoy, puedes ver calaveras y huesos varios a lo largo de la ciudad.
Palacio de los Golfines de Abajo
Fachada Palacio de los Golfines de abajo
Si quieres recorrer un palacio medieval totalmente reconstruido no puedes perderte esta visita en tu fin de semana en Cáceres. La entrada cuesta 2,5€ y hay que comprarla y reservar previamente.
En la fachada ya se puede ver los restos de esta importante familia que estuvo al servicio de los Reyes Católicos, de ahí que aparezca algún símbolo en ella. Dentro podrás recorrer las estancias tal y como se encontraban en su origen y con su recorrido podrás ver la evolución de las casas nobiliarias a lo largo de la historia.
Vista del Palacio de los Golfines desde la Concatedral
Plaza de San Jorge
Fuente del jardín de Cristina Ulloa
Flanqueada por palacios e iglesias, esta plaza está en el corazón de la ciudad monumental de Cáceres. Como estás viendo, Cáceres está rodeada de leyendas e historias, y esta plaza no iba a ser menos. Se cuenta la leyenda de cómo San Jorge conquistó la ciudad de las manos de los musulmanes, la historia de amor entre una princesa mora y un cristiano, etc. Pero a decir verdad, San Jorge es el patrón de la ciudad.
Un rincón dentro de la ciudad monumental
Desde esta plaza puedes acceder a la judería vieja si giras a la izquierda o a la Iglesia de San Francisco Javier (la que está delante de ti), pero además está el jardín de Cristina Ulloa, un pequeño y bello jardín, al estilo morisco, con su fuente de agua y su pozo.
Iglesia de San Francisco Javier
Fachada de la iglesia de San Francisco Javier
Coronando la Plaza de San Jorge se encuentra la iglesia de San Francisco Javier. Con su fachada encalada quien diría que está iglesia es barroca, su interior lo demuestra. En los bajos de esta iglesia se encuentra otro aljibe, aunque de menor interés que el del Palacio de las Veletas.
Justo a su lado se encuentra un convento jesuita, ahora reconvertido en la Escuela de Arte Dramático de Extremadura (ESAD).
Está iglesia se ha hecho famosa por haber salido en la famosa serie de Juego de Tronos, aunque algo cambiada, ya que su fachada en la serie aparecía de color salmón.
Calle del mono
La leyenda del mono
Muy cerca de la Iglesia de San Francisco Javier verás en una esquina la figura de un mono de hierro suspendido en el aire. Te encuentras en la calle del mono. ¿De dónde viene este nombre? Todo se debe a la casa donde se ubica el cartel y a sus primeros habitantes.
Y es que varias leyendas hablan del matrimonio y su imposibilidad de concebir un hijo. Dada esta situación Gonzalo de Cáceres, el marido, decide comprarle un mono a su depresiva mujer Marina, de ahí la expresión de cuando estás aburrido de “cómprate un mono”. En uno de los viajes de Gonzalo, Marina es seducida por un joven apuesto con el que por fin puede ser madre. Este niño es del agrado de todos menos del mono al sentirse desplazado… ¿el final? Mejor que os lo cuenten allí…
Ahora este edificio es el archivo y biblioteca de la Diputación de Extremadura.
Casa-Museo Árabe Yusuf Al-Burch
El patio del Museo Árabe
Si quieres visitar una antigua casa árabe, en Cáceres puedes. Esta casa es un museo que no pasa por alto ningún tipo de detalle. Podrás ver un antiguo patio, la sala de té, el salón de las visitas, el harem y el dormitorio situado justo encima del hammam. Además esta pequeña casa cuenta con su propio pozo de agua que abastecia a todos los miembros de la casa.
Vist desde la entrada
La sala del Harem
Lo que más nos gustó, fue el hammam que hay en la planta del sótano. Cuando bajas la humedad te azota en toda la cara y ves como con el agua y los vapores que soltaban se podía calentar el dormitorio situado en la parte superior. La entrada son 2€ por persona y el recorrido se hace en media horita. Una visita muy interesante y qué hacer en Cáceres.