La ruta de los pueblos de colores de Segovia se compone de 8 pueblos a lo largo de la carretera CV-111 desde Riaza. Es una buena ruta para hacer un día si estás buscando una excursión desde Madrid diferente, ya que solo está a hora y media de la capital; algo que hacer si estás en la Estación de ski de la Pinilla, que está a 15 minutos en coche o una ruta que hacer desde Riaza; pueblo del que dependen todos estas pedanías.
8 pueblos de colores de Segovia
Estos pueblos se clasifican en tres colores: amarillo, rojo y negro. Deben estos colores tan llamativos a los colores de las piedras de los alrededores con los que se construyeron sus casas antiguamente. Pizarras, arcillas y cuarcitas son los materiales con los que se construyeron estos 8 pueblos de colores de Segovia.
Un consejo, no te agobies por los tiempos o por no encontrar grandes puntos turísticos o históricos. Primero porque ver los 8 pueblos en un día es posible y, segundo, porque si gran atractivo turístico son ellos mismos, recorrer tranquilamente sus calles y disfrutar de su silencio y sus colores tan particulares. ¿Quieres descubrirlos en un día?
Pueblos Amarillos
La soleda de Alquité
Alquité
El pueblo más pequeño de la ruta. Son solo cuatro calles y no llegará a tener más de veinte casas en total. Solo tiene cuatro habitantes y suerte si te encuentras con ellos en la calle. Aún así merece la pena visitarlo para ir introduciéndote en la tranquilidad que respiran estos pueblos.
Iglesia San Pedro de Alquité
En todos los pueblos te encontrarás con dos puntos en común: la iglesia y el teleclub, taberna o bar (nunca faltan en un pueblo español). La Iglesia de Alquité es San Pedro de Alquité y es de estilo románico, si te encuentras con algún vecino puede que te abran la iglesia para verla por dentro.
Calles amarillas
Rincones de Alquité
Martín Muñoz de Ayllón
Calles de Martín Muñoz de Ayllón
Lo primero de todo, está prohibido aparcar dentro del pueblo. A la entrada del pueblo cuentan con un parking gratuito, desde ahí, tardarás 5 minutos andando hasta la Plaza Mayor del pueblo.
Iglesia de San Martín de Tours
Dentro de los pueblos de colores de Segovia, Martín Muñoz de Ayllón es uno de los más bonitos. Está siendo bastante rehabilitado y pasear por él y tener la sierra a dos pasos la hacen un enclave perfecto para desconectar. Las vistas de toda la sierra de Ayllón desde la Iglesia de San Martín de Tours es lo más especial del pueblo, más allá de sus preciosas calles.
Entrada a Martín Muñoz de Ayllón
Si tienes tiempo, puedes hacer un par de rutas de senderismo por la zona, una de ellas va a la cascada de la Chorrera y la otra por el collado de las cabras, de interés natural.
Pueblos Rojos
Madriguera
Madriguera y sus rincones
El más grande de todos los 8 pueblos de colores de Segovia. Llegó a tener 750 habitantes. También es el mejor conservado de todos y cuidado. Es uno de los dos pueblos que vimos con restaurante, y al estar en el medio de la ruta fue donde paramos a comer.
Lo mejor que puedes hacer es perderte por sus calles, descubrir rincones por doquier, ver su biblioteca por fuera y tratar de descifrar el letrero que reza el cementerio.
Debes dejar el coche en el parking gratuito que está en la parte trasera de la Iglesia de San Pedro de Madriguera.
La tranquilidad de Madriguera
Villacorta
Iglesia de Santa Catalina
Es uno de los pueblos más rojos de toda la ruta. Tanto sus calles como sus casas están realizadas en arcilla roja de los alrededores que les da ese color característico. Aquí la iglesia del pueblo es la Iglesia de Santa Catalina de Villacorta.
Villacorta
En Villacorta también puedes ver un puente romano y si quieres desconectar, puedes quedarte a dormir o comer en un molino rehabilitado a las afueras del pueblo.
Si te vas fijando en todos los pueblos, según el color que sea el pueblo, así son las calles y los carteles de las calles; verás las calles rojas, amarillas y negras.
El Negredo
Plaza de El Negredo
Este es el último pueblo de la ruta de los 8 pueblos de colores de Segovia y la guinda perfecta a este día.
Lo peculiar de este pueblo es que dentro de él tienen una ermita y, a las afueras, en una colina, tienen la Iglesia de la Virgen de Vallehermoso. Si tienes tiempo sube a verla y verás que desde su pórtico sale un árbol. Además, no puedes pederte su plaza mayor, es preciosa.
Casas de cuento
Pueblos Negros
Becerril
Las calles siempre del mismo color que las casas
Será el primer pueblo negro que veas en esta ruta de pueblos de colores de Segovia. Es muy pequeñito, consta apenas de 10 calles. Y como es normal en estos pueblos, el centro es la iglesia del pueblo. Aquí la iglesia se llama Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. En todos estos pueblos las iglesias están cerradas y tendrás que pedir permiso para poder verlas.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
La carretera de entrada y la llegada al pueblo es muy bonita, rodeada de naturaleza, al torcer una curva te encontrarás con el pueblo como si apareciera de repente salido de la nada. Te recomiendo que aparques el coche justo en la fuente de la entrada, ahora seca y vayas a pie por el resto de Becerril.
Serracín
Anclado en el tiempo
A más de 1200m de altura, estos 8 pueblos de colores de Segovia parece que se hayan paralizado en el tiempo. Sus calles empedradas vacías y rehabilitadas parece que hubieran estado así siempre.
Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad
Los nombres de las calles del mismo color que las casas
En Serracín podrás ver los restos de su Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad, podrás identificar dónde estaba el altar y a su espalda, verás el antiguo cementerio.
Desde aquí tienes unas vistas preciosas y puedes ver algunos de los pueblos de esta ruta, como Madriguera, Becerril, Villacorta o El Muyo.
Detalles de Serracín
El Muyo
El pueblo negro más grande
El pueblo negro que más nos gustó y el más grande de los pueblos negros de Segovia. Pasear por sus calles es como pasear por tuneles negros sin techo y, sin darte, cuenta apareces en medio del campo verde. Un contraste muy bonito.
Casitas rehabilitadas
Aquí la pizarra cubre tanto las fachadas de las casas, los tejados, la Iglesia de San Cornelio y San Cipriano y las calles.
Su taberna tiene un merendero con unas vistas preciosas a la sierra de Ayllón. Te recomiendo que te sientes y escuches el silencio que inunda estos pueblos.
Iglesia de San Cornelio y San Cipriano
Callejones con encanto
¿Dónde comer?
A lo largo de esta ruta de los 8 pueblos de colores de Segovia pudimos ver 4 o 5 restaurantes en total. Nosotros elegimos comer en Madriguera por ser la mitad del recorrido y aquí solo está el restaurante La Pizarrera.
Croquetas caseras
Tomate negro
Un restaurante con ingredientes de la zona que cambia su carta según la temporada. Una antigua casa restaurada te ofrece un ambiente moderno y tradicional donde prima la tranquilidad que rodea a todos estas pedanías.
Presa ibérica
En La Pizarrera puedes comer productos típicos de la huerta y carnes de la sierra hechas a la piedra en brasas con pizarra.
No puedes irte de aquí sin probar los tomates negros, que saben realmente a tomate; las croquetas caseras o las carnes a las brasas con un sabor y una textura a la altura de muchos restaurantes de postín.
¡Ah! y los postres… todos caseros, en especial la mousse de chocolate, para los amantes del chocolate puro y la tarta de queso super cremosa.
Si me llegan a decir esto antes de ir a Escocia no me lo creería. Una ruta de 9 días en Escocia no es tiempo suficiente para conocer bien este país. Escocia tiene tantos lugares que visitar y tan bonitos, que te quedas embobado un buen rato en cada uno de ellos, y cuando te quieres dar cuenta no te da tiempo a visitar todo lo que te habías propuesto.
Escoge bien los sitios que quieres ver y disfrútalos. No satures tu viaje porque pasarás más tiempo en el coche o bus que en otro lado. Si te gusta, ya tendrás ocasión de volver a Escocia. El dicho ‘menos es más’ cobra mucho sentido en Escocia.
Comencemos la ruta de 9 días en Escocia:
Día 1 y 2: Edimburgo
Estos dos días los dedicamos enteramente para descubrir la capital de Escocia. Nosotros la primera mañana hicimos un free tour. Nos encanta porque te sitúan en el contexto histórico de la ciudad y el país y te descubren las localizaciones importantes para que tú, después, puedas ir a hacerte fotos en ellas.
Un recorrido perfecto para dos días en Edimburgo con un free tour incluido y visitas al Castillo sería:
Día 1:
Por la mañana free tour (también los hay tematizados como el de Harry Potter o el de fantasmas).
Por la tarde Greyfriars Cementery, Grass Market, Victoria Street y Arthur´s Seat.
Por la tarde los callejones de la Royal Mille, Old Town y Calton Hill.
Este recorrido supone disfrutar de todos los puntos, haciéndote fotos, recorriéndolos, parándote en tiendas, beberte una pinta en pubs, disfrutar de la música callejera, etc.
Nosotros el segundo día, de nuestra ruta de 9 días por Escocia, cogimos el coche por la tarde y pusimos rumbo a nuestro primer destino: Stirling. Aquí nos interesaba el Castillo, muy bien conservado, y el casco histórico, que conserva el encanto de antaño.
Como llegamos tarde y el castillo estaba cerrado (cierra a las 18h.) dimos una vuelta por la ‘Old town‘ viendo los puntos más importantes:
Holy Rude, es decir, el cementerio de Stirling con unas tumbas y mausoleos muy bonitos y un mirador con el castillo de fondo.
Argyll´s Lodging y Mar´s Wark, una casa señorial cerca del cementerio con una fachada imponente. Se puede visitar con la entrada del Castillo.
Hospital de Cowane, da un poquito de miedo, imaginándote alguna peli de terror y sillas de ruedas antiguas apareciendo por las ventanas desde la calle.
Puente de Stirling, un bello puente con una historia sangrienta, donde William Wallace ganó la batalla del Puente de Stirling.
Monumento a William Wallace, más allá del puente se divisa el monumento al escocés más famoso de la historia. Merece la pena subir y contemplar el principio de las Highlands y Stirling a vista de pájaro.
NOTA: este monumento no está incluido dentro de la Explorer Pass. Su entrada cuesta 10,50 libras.
Día 3: Castillo de Stirling y Parque Nacional de Loch Lomond
Nos levantamos pronto para estar los primeros en el castillo y verlo sin gente. Acertamos, solo había un par de grupos de turistas y, como nosotros teníamos comprada la Explorer Pass, vimos el castillo a solas mientras los guías compraban sus entradas.
El Castillo de Sitrling está perfectamente conservado, tanto es así, que te puedes imaginar cómo era la vida en él cuando estuvo habitado. Además, encuentras representaciones por las estancias recreando oficios de la época, canciones, tareas diarias, etc.
No te pierdas el Palacio Real, restaurado con las pinturas originales en las paredes y mobiliario de la época, así como, el Salón Real en el que te sentirás el Rey del Castillo.
Dentro del castillo, tienen una sección dedicada a los niños, donde pueden ver, oler y meterse dentro de la vida del castillo. Hasta tienen trajes medievales para que se los prueben los niños… y no tan niños.
Después de disfrutar del castillo que más nos gustó en nuestra ruta de 9 días en Escocia, durante aproximadamente 2 horas o 2 horas y media, pusimos rumbo al Parque Nacional de Loch Lomond.
Concretamente fuimos a Balmahay tardamos unos 40 minutos desde el castillo de Stirling. Desde Balmaha sale un sendero hacia Conic Hill, una colina de 361 metros con un camino más o menos empinado, pero desde donde disfrutas de unas vistas del Lago Lomond impresionantes.
Ascender a esta colina supone unas 2 horas entre la subida y la bajada, pero se disfruta mucho. Lo recomiendo 100%.
NOTA: llevar calzado de montaña o por lo menos de senderismo, el terreno es de arena, roca y barro.
Una vez acabamos esta ruta teníamos pensado ir a un castillo en ruinas, pero no nos dimos cuenta de que estábamos al lado y nos lo pasamos. Os dejo el nombre para que lo visteis porque tenia una pinta muy buena ‘Buchanan Castle’ en Drymen.
Posteriormente paramos en Luss, un pueblecito con casitas bajas en la orilla oeste del lago. Dar un paseo por este pueblo es un placer, perderte por sus calles, quedarte un buen rato viendo el lago desde la orilla, visitar su iglesia con tumbas centenarias y salir por la puerta trasera del cementerio, llegar al rio, etc. Haz un alto en el camino en este pueblo antes de entrar en las Highlands.
Si no te quieres perder nada de las Highlands puedes reservar un tour de tres días para recorrerlas a fondo.
De camino a Fort William, donde teníamos nuestro hotel, hicimos un alto en el camino para ver las cascadas de Falloch(Falls of Falloch) están a 3 minutos andando desde el parking que está al lado de la carretera. Son unas cascadas pequeñitas pero bonitas, y para matar el gusanillo de ir viendo tantas por la carretera, está bien.
Cuando volvimos al coche, de repente empezamos a ver campos inmensos que daban ganas de parar en todos lados para hacer fotos. ¡Ya estábamos en las Highlands!
En la carretera y, casi ya dentro del valle de Glencoe, está el mirador de Loch Tulla, de parada obligatoria para admirar el paisaje que tienes delante.
Para llegar a Fort William teníamos que pasar por Glencoe, pero como ya se hacía tarde, decidimos dejarlo para el día siguiente e ir derechos a ver la puesta de sol en un sitio único.
Casi dos horas después de salir de Luss, con varias paradas para contemplar el paisaje y hacer fotos, llegamos a nuestro destino: el castillo Stalker. Un castillo enclavado en un islote en medio del lago Creran.
Toda una maravilla, además, estábamos solos. La paz y la calma que se respiraba en este lugar era especial. La puesta de sol tras el castillo fue preciosa: el juego de luces, con el agua y la niebla fue maravilloso. No es muy conocido, pero yo volvería de nuevo y lo recomendaría a mis amigos.
Tras ver el castillo, ya si que nos dirigimos a nuestro hotel en Fort William.
Este día fue intenso y vimos muchas cosas y todas ellas preciosas, un día muy bien aprovechado.
Día 4: Valle de Glencoe
Este día comenzó haciendo una ruta por el valle de Glencoe. Volvimos hacia atrás por la carretera, que habíamos pasado el día anterior, y nos paramos primeramente en el parking de la ruta de ‘The Buachaille’. Vimos que la gente se quedaba en la roca más cercana a la carretera y no se adentraban en el valle; todo un error, porque una vez te adentras un poco, te encuentras rodeado de montañas inmensas que, ni en sueños, nos imaginábamos. Caminamos unos 30 minutos y nos dimos media vuelta para ir a nuestra siguiente parada.
Dos kilómetros más adelante paramos en ‘Meeting of the Three Waters’.Una cascada donde confluyen las aguas de 3 fuentes diferentes. Párate y encuentra las 3 fuentes de donde mana el agua.
NOTA: A lo largo de todas las carreteras de Escocia, encontrarás arcenes donde puedes pararte ¡Aprovéchalos! Algunos de estos espacios se dedican a dejar pasar a los coches del sentido contrario, por ser demasiadas estrechas las carreteras para que pasen dos coches a la vez.
Otros 2 kilómetros más adelante, te encuentras con otro parking, el de las conocidas ‘The Three Sisters’. Tres imponentes montañas que se exponen delante de ti con toda su grandeza. Esta es una parada obligatoria para conocer Glencoe.
Nosotros hicimos un recorrido que sale desde la izquierda y llegamos a ver una cascada preciosa sobre el rio Coe.
Con esta ruta nos despedíamos del valle de Glencoe, al que hubiera dedicado un día entero… ¡y más! Pero teníamos que continuar.
Disfrutamos tanto el valle que se nos hizo tarde para ver el tren Jacobita en el viaducto de Glenfinnan, pero si tenéis oportunidad de verlo, desde aquí tenéis 40 minutos de camino.
Los horarios para verlo mejor son: a las 11m y a las 13pm. Id con tiempo, puesto hay mucha gente y el parking es limitado. Nosotros lo veremos en el próximo viaje a Escocia (ya tenemos excusa).
Ya que perdimos la oportunidad de ver el tren, nos dirigimos a otro punto de interés, que además nos pillaba de paso: el castillo de Eilean Donan. Este castillo es famoso por ser el escenario de ‘Los Inmortales’. El trayecto es de unas dos horas.
A los pies del lago Duich, este castillo también es famoso también por otras películas como Braveheart. La entrada no está incluida en la Explorer Pass; aun así, es una parada en el camino a la isla de Skye en la ruta de 9 días por Escocia.
Nos encontrábamos ya muy cerca de nuestro destino, la isla de Skye. Para llegar a esta isla hay que cruzar el puente por Kyle of Lochalsh, visitamos el pueblo de Kyleakin, pero llovía tanto que nos volvimos al coche y fuimos directamente a la capital de Skye.
Portreees el pueblo más grande de la isla de Skye y donde se encuentra la mayoría de los alojamientos. Suele ser la base para visitar todos los rincones de la isla.
NOTA: los restaurantes de este pueblo suelen cerrar cocinas a las 21.30pm, e incluso algunos no abren a la hora de la cena o están completos en temporada alta si no reservas, así que ve a cenar pronto si no quieres irte a la cama sin comer.
Día 5 y 6: Isla de Skye
El día hoy no acompañaba, llovía constantemente, pero la ruta que teníamos planificada era recorrer la isla por la costa e ir viendo los diferentes puntos clave de la isla.
NOTA: El clima en la isla de Skye es más radical que en el resto de Escocia, es muy húmedo y llueve prácticamente a diario.
Nuestro plan de viaje, para los dos días, incluía la visita a los siguientes puntos:
Old Man of Storr: Una montaña que se te presenta con una niebla imponente, pero cuando te vas acercando ves más factible subirla. Desde arriba hay una vista preciosa de la isla con el mar de fondo. Una postal de película.
Existen varias rutas alrededor de la montaña, si tienes tiempo haz alguna.
Kilk Rock/Mealt Falls: Es la foto típica de Escocia, unos acantilados altísimos de donde surgen cascadas dignos de pararse en ellos un rato. Una parada corta en la carretera, cerca del punto anterior, pero que disfruta como un enano.
Quiraing:Llegar hasta esta montaña cuesta un poco, es como subir un puerto de montaña, pero en sentido contrario y sin apenas espacio en la carretera. Una vez que llegas arriba, se extiende frente a ti unos prados enormes elevados e infinitos. Te das cuenta de que ha merecido mucho la pena subir hasta aquí. Particularmente, me sorprendió mucho porque no me esperaba para nada estas vistas. Se convirtió en uno de mis imprescindibles en una ruta de 9 días por Escocia.
Neist point Lighthouse:Otro punto famoso de Escocia. En este faro, si el día os acompañan, podréis ver las islas Hébridas. Llegar hasta él, igual, tiene tela con la carretera que no ves quien viene de frente, pero esta guay.
Dunvegan Castle:Está muy bien para refugiarte de la lluvia, además, es el monumento más visita de la isla (y posiblemente el único). La entrada cuesta 12 libras. También tiene unos jardines muy bien cuidados. Nosotros no pudimos entrar porque iban a cerrar. Abren hasta las 17.30pm.
Fairy pools: A los pies de las Black Cuillins, una cadena de montañas rocosas en Escocia, se localizan las Fairy Pools. Unas piscinas naturales azules con agua extremadamente cristalina. Atraen a aventureros de todo el mundo, que se sumergen en sus aguas para hacer nado extremo. Los que prefieren quedarse afuera, aprovechan para sacar fotos en el lugar.
NOTA: Llévate botas de montaña, hasta llegar a ellas deberás pasar por riachuelos, barro, grava, etc. También nos dijeron que los mejores días para ir a visitarlo son los lluviosos, ya que cuando está seco la gente se resbala mucho más y hay accidentes.
Otro punto de interés es ‘Coral Beach’, debido a la lluvia no pudimos verlo (check para el próximo viaje).
De un punto a otro hay de media unos 30 minutos en coche y se te pasa el día volando, por lo que escoged bien lo que visitáis y disfrutadlo. También los trayectos están chulos. Veréis vacas peludas, casitas en medio de la nada, cabinas de teléfono inglesas en el campo, cascadas, prados y un largo etcétera.
Día 7: De camino a Ullapool
Esta jornada lo planteamos de carretera pura y dura, pero a lo largo del camino vimos pueblos encantadoresque no son nada conocidos. Teníamos que ir hasta Ullapool para hacer noche allí y al día siguiente ir a Inverness pasando por unas cascadas.
Nos gustó mucho descubrir cascadas escondidas y poco conocidas, pero si no disponéis del tiempo suficiente, podéis ir directamente desde la isla de Skye a Inverness. Incluso desviaros y ver alguno de estos pueblos de camino.
Erbusaig: el pueblo en sí no tiene nada, pero estábamos tan tristes de no haber visto a vacas peludas típicas de Escocia que, cuando las vimos, nos paramos a hacernos fotos con ellas. Había muchas en una pradera en frente de las casas, sin cerca ni nada. Así que nos acercamos a ellas, con prudencia.
Plockton:este pueblecito pesquero en medio de una bahía es muy bonito, a la par que tranquilo. Sus casas, todas con vistas a la bahía, son únicas, y el Castillo de Duncraig se aparece en la otra orilla. Actualmente el castillo es un hotel, que está cerrado por reformas. Disfrutamos de una comida muy rica en la orilla. Todo perfecto, ¡hasta salió el sol!
Fiordo de Torridon: hasta llegar aquí pasamos por una de las carreteras más bonitas de Escocia. En pleno bosque, rodeados de árboles y arbustos que, cuando se abrían, dejaban paso a unas vistas al mar. Era como estar en una película de fantasía.
Si que es verdad, que llegar al Fiordo y verlo ahí en medio del mar fue desilusionante. Nos esperábamos otra cosa; por lo que yo no lo recomiendo para ver.
Ullapool:después de más de dos horas de camino llegamos por la tarde a Ullapool. Un tranquilo pueblo pesquero con un puerto bastante grande. Aunque es pequeño tiene su encanto. Puedes darte un paseo y ver todas las casas mirando al mar y todas ellas blancas. Puedes hacer base aquí para ir al este o seguir al norte.
A pesar de parecer poco recorrido para este día, la verdad, es que tuvimos mucho coche y se pasó volando. Fue el día más pesado en cuanto a coche.
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Día 8: Inverness y Lago Ness
O el día de las cascadas, jeje. De camino a Inverness teníamos programada la visita a tres cascadas a cuál más bonita.
Desde Ullapool, y a escasos 10 minutos en coche, vimos nuestra primera cascada del día: Cascadas de Measach. Para llegar a ellas debes coger la salida a la carretera A832 desde la carretera de Ullapool (A835) y, un minuto después de coger esta carretera, verás el parking. Bajar hasta ellas es un paseo de 5 minutos entre árboles y flores agradable. Cuando llegas allí no ves la típica cascada vertical, sino más bien está debajo de tus pies. Súbete al puente para admirarlas y sentir un poco de vértigo.
Más adelante, hicimos nuestra siguiente parada en Roggie Falls, a 30 minutos en coche. Desde la carretera se ve muy bien el parking y puedes llegar a ellas por dos senderos, el corto y el largo. Tienes señales que te indican ambos caminos. El sendero corto te lleva en 5 minutos y es un camino muy cómodo. La cascada es muy bonita y merece la pena verla por ambos lados del puente.
Cuando estuvimos vimos a dos pescadores de salmones, e incluso vimos algún que otro salmón saltando río arriba.
Después de admirar esta maravilla de la naturaleza, visitamos el pueblo de Cromarty.Es un pueblo singular. Te recibe con unas plataformas petrolíferas bastante horribles y enormes, pero el centro histórico lo compensa. Este centro histórico data de la época medieval y cuenta con una iglesia y un cementerio centenario. Si tienes tiempo, da una vuelta por este pueblo tan peculiar de la costa este. Sí sí, ya has cruzado del oeste al este de la isla. Además no es nada típico en las rutas de Escocia.
Posteriormente, pusimos en el GPS ‘Fairy Glen’, unas cascadas de cuentos de hadas. El GPS nos dejó justo en la entrada más cercana de las cascadas, y el final de un sendero que parte del pueblo de Rosemarkie. No nos queríamos perder este sendero, de fácil recorrido, y lo hicimos a la inversa. En total estuvimos una hora recorriéndolo e hicimos muy bien porque los paisajes parecían sacados de la serie ‘Outlander’.
Camino a Inverness, teníamos que cruzar un pueblo llamado Fortrouse, en el que no teníamos pensado parar; pero fue ver, a lo lejos, las ruinas de su catedral y no pudimos evitarlo. Dejamos el coche y fuimos de cabeza.
La Catedral de Fortrouse data del siglo XII; está hecha en piedra rojiza y se posa sobre un prado verde que hace que destaque más. Con el paso del tiempo, se ha ido derrumbando, dejando a la vista las tumbas de su interior de un color blanco puro que destaca sobre el rojo de la fachada. Dedícale 5 minutos de tu tiempo.
Ahora sí, después de media hora de trayecto llegamos a la capital de las Hihglands, Inverness.Tras varios días entre pueblos y rincones escondidos, Inverness es como volver de nuevo a la civilización. Se hace difícil volver a ver ciudades después de los pueblos tan bonitos vistos anteriormente. Pero pasear por su centro histórico, ver el castillo de Inverness (por fuera) o pasear por la ribera del río es obligatorio a tu paso por Inverness en la ruta de 9 días por Escocia. Descubre también los bares que tiene esta ciudad, algunos de ellos con terrazas escondidas.
Después de pasear por Inverness cogimos, por ultima vez, el coche y fuimos al hotel de esa noche, en medio del Lago Ness para buscar al monstruo durante la noche. Fue nuestra última noche en Escocia y no pudo ser mejor, durmiendo a los pies del lago más famoso del mundo (que no el más bonito).
Día 9: de vuelta a Edimburgo
Este día fue de tránsito. Después de 3 horas en coche que teníamos hasta Edimburgo y, tras devolver el coche, nos dispusimos a disfrutar del festival más famoso de Escocia: el Fringe Festival. Nuestra ruta de 9 días en Escocia se estaba acabando, pero por todo lo alto.
Tuvimos mucha suerte de coincidir con este festival en nuestro viaje. Se monta una muy gorda en la ciudad, y es que en cada esquina puedes encontrarte de todo. Músicos, actuaciones teatrales, cantantes, circo, etc. y todo gratis. La población de Edimburgo se multiplica por tres y es difícil (y caro) encontrar alojamiento.
Nosotros solo pasamos el día y lo disfrutamos muchísimo. Una vez caída la noche, cogimos un taxi de camino al aeropuerto para dormir en él y coger el primer vuelo de la mañana de vuelta a casa.
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Así acababa nuestra ruta de 9 días en Escocia. Un viaje lleno de paisajes espectaculares, castillos históricos, senderos, cascadas, montañas, acantilados, pueblos y rincones inolvidables.
Por lo que vi al organizar el viaje, las rutas suelen ser en dirección contraria. Empiezan por el Lago Ness y acaban en Loch Lomond. Podéis hacerlo de ambas formas, pero para mí lo más “normal” del viaje fue el Lago Ness.
Así que podéis empezar de menos a más o vivir con más energía lo más bonito del viaje y después ir más relajadamente.
Con todo lo contado en este post ¡ya tengo ganas de volver!
Me declaro fan incondicional de este país. I love Escocia, ¿y tu?
Hacer la maleta, coger tus gafas de sol, meterte en tu coche, tu disco favorito en la radio y disfrutar del camino cada minuto. Eso es un buen roadtrip. Tú, tu coche, tu música y tu compañía, ¿Qué más se puede pedir? La libertad que te da una ruta en coche no te la da ningún otro tipo de viaje: parar donde quieras, ir al ritmo que decidas, conversaciones interminables, cantar a gritos… disfrutar en esencia del camino, y ¿por qué no hacer un roadtrip por España?
En España tenemos rutas en coche para desconectar, disfrutar y descubrir lugares impresionantes de España. Tenemos miles de sitios a los que ir y pasar unas vacaciones muy agradables. Además, para todos los gustos: en familia, con amigos, de naturaleza, cultura o playa. Si buscas un roadtrip por España aquí te enseñamos unos cuantos, concretamente uno por cada mes para que no tengas ni un solo mes de aburrimiento.
Enero, Interior de Alicante
Bocairent
Esta ruta de coche por el interior de Alicante te hará descubrir paisajes super chulos en un fin de semana. Especialmente recomendado para los que les gusta el turismo rural y activo. Un roadtrip por España diferente.
Comenzamos esta ruta en Bocairent, uno de los pueblos más bonitos de España y ¿por qué? solo hay que contemplar la panóramica desde la carretera para contemplar un pueblo en lo alto de una colina que esconde unas cuantas cuevas y cavas. Muy cerca de aquí puedes adentrarte en el parque natural de Sierra de Mariola. En este parque podrás hacer rutas de senderismo o bici que discurren entre manantiales y cuevas.
Una vez dejes el parque atrás, baja dirección la costa hasta Guadalest, otro pueblo dentro de la guía de pueblos más bonitos de España. Encaramado también en una colina, este pueblo posee una historia interesante. No te olvides de visitar sus dos castillos y su prisión del s. XII.
Nuestra penúltima parada son las Fuentes del Algar, famosas piscinas naturales que en verano suelen estar repletas de gente. En esta época del año puedes encontrarte las piscinas y diferentes cascadas que tienen heladas. Ten cuidado con el horario, que solo está abierto hasta las 15.30h.
Fuentes del Algar
Y para acabar la ruta puedes terminar visitando Calpe. En esta ciudad de costa podrás disfrutar de su un paseo por sus playas siempre con su peñón de Ifach vigilando todos los movimientos; y los baños de la reina, un conjunto de piscinas naturales de agua salada, con la leyenda de una reina mora refrescándose en ellas.
Este roadtrip por España, concretamente, por la Comunidad Valenciana te hará pensar más allá del turismo playero tan característicos de esta comunidad.
Febrero, Pueblos blancos
Más de 15 pueblos configuran los llamados pueblos blancos de Cádiz. Todas las fachadas de las casas, encaladas, les dan ese color tan característico y tan puro. A pesar de ello, en verano el calor es tan acuciante que es mejor visitar estos pueblos en invierno.
Este roadtrip es uno de los clásicos por España. Una ruta para conocerlos puede durar entre 4 y 7 días. Lo mejor es comenzar desde Arcos de la Frontera, de ahí pasarás por pueblos como Algodonales o El Gastor donde podrás visitar las cuevas de Fariña o del Susto.
Te adentrarás poco a poco en el Parque natural de la Sierra de Grazalema, ideal para hacer rutas a caballo o senderismo. La finalización de esta ruta es en Setenil de las Bodegas. Este pueblo es famoso por su originalidad. Parte del centro se encuentra bajo una montaña y las casas son cuevas. No te vayas de aquí sin comprar aceite de oliva con denominación de origen “Sierra de Cádiz”.
Setenil de las Bodegas
Si quieres una actividad original, puedes hacer tours temáticos sobre los bandoleros más famosos que habitaban estas tierras en el s. XIX, incluso puedes ser secuestrado por ellos.
Marzo, Valle del Jerte
Valle del Jerte
En este mes en el que es el cerezo está en flor, bien se merece una visita al Valle del Jerte. Además de ver campos blancos y rosas de miles de cerezos podréis ver pueblos preciosos, cuevas peculiares, una sierra y bajar hasta el infierno.
Esta ruta puede durar si la haces completa 4 días aunque, si lo reduces, puede ser de un fin de semana.
El Valle del Jerte comprende 11 municipios en la provincia de Cáceres, todos ellos rodeados de cerezos que entre mediados de marzo y principios de abril florecen. Si quieres tener una vista panorámica de todo el valle debes ir al puerto de Tornavacas o hasta Piornal, uno de los pueblos más altos.
No te vayas de la zona sin traer un souvenir gastronómico como mermelada, pimentón de La Vera o vino de Pitarra.
En la zona existen rutas de senderismo en Casas del Castañar con sus castaños centenarios. También la famosa reserva natural de la Garganta de los infiernos; donde podrás ver sus piscinas naturales, formados por un total de 13 piscinas. Si tienes buen tiempo puedes darte incluso un chapuzón en ellas. O por último, la cascada Chorrero de la virgen.
Garganta de los infiernos
Si quieres extender este roadtrip te aconsejo que pases por el Parque regional de la Sierra de Gredos, puedes pasar dos días en el parque haciendo diferentes rutas de senderismo por las cinco lagunas de la sierra. Cruzarás el par de oeste a este y saldrás por los pueblos de Arenas de San Pedre y aquí bien cerca está las Cuevas del Águila, unas cuevas que tienen un kilómetro de largo y casi un millón de años.
Abril, Teruel
Teruel
Si quieres escaparte un fin de semana, un fin de semana largo o los cuatro días de Semana Santa te recomiendo que descubras Teruel en coche y sus alrededores. En esta época el tiempo es más tranquilo sin tener temperaturas asfixiante que suele haber en verano. Si comienzas en Teruel, te recomiendo que visites el Torico y la casa de los supuestos amantes de Teruel, que sí, que existe como la ciudad. Teruel es una gran desconocida pero sus calles y su color teja la hacen única en España.
Una vez conocida Teruel, pon rumbo al norte para ir al Monasterio de Piedra. En dos horas habrás llegado. Si tienes tiempo párate en el pueblo de Albarracín. Este pueblo ubicado en lo alto de una colina, conserva sus murallas medievales intactas. Da un viaje en el tiempo a través de sus callejuelas empedradas y casi desérticas.
Cascada Trinidad – Monasterio de Piedra
Una vez llegado al Monasterio de Piedra recorre sus jardines, sus cascadas, sus grutas y su monasterio de más de 800 años en perfecta conservación. Resérvate una tarde para ir a su balneario y disfrutar de sus aguas termales. ¡No me digas que no es un plan para compartir en pareja!
Mayo, Costa de la Luz (Cádiz)
Puerto de Santa María
Un plan de relax y alternativo. Lo mejor es alquilar una caravana e ir de camping en camping recorriendo la zona parando donde más te apetezca. Cádiz nos tiene enamorados, sus puestas de sol, sus aguas cristalinas, su gente y su gastronomía son para quitarse el sombrero. Por todo esto es difícil aconsejarte tiempos de viaje. Cuando más tiempo tengas para este road trip, mejor.
Te aconsejo que empieces por Cádiz capital, que recorras sus calles llenas de bares y pruebes sus pescaitos, sus frituras y sus cañas bien fresquitas. No puede faltarte una visita a el Puerto de Santa María y cenar en la freiduría El Romerijo. De ahí, coge y ve bajando por toda la costa; pasando por San Fernando y su playa Camposoto que se conecta con Sancti Petri. Seguir hasta Conil y disfrutar de la noche tan llena de vida con sus casas blancas. Subir hasta el pueblo de Vejer de la Frontera, declarado uno de los pueblos más bonitos de España.
Seguir por Los Caños de Meca, Barbate, Zahara de los atunes, Bolonia, y su famosa playa, y llegar hasta Tarifa para volverte loco con el aire. En todo esta ruta en encontrarás cientos de playas preciosas, acantilados y calas que, dependiendo del aire para donde sople serán más accesibles o no.
Igualmente por el camino, encontrarás restaurantes donde comerás genial y barato. Todo esto hará que no quieras terminar el viaje.
Junio, Lagos de Covadonga (Asturias)
Lagos de Covadonga
Los meses de verano nos lo reservamos para ir al norte, huyendo del frío y las playas masificadas de levante y Andalucía. Y es que en el norte podemos encontrar rutas preciosas, llenas de naturaleza, pueblos únicos y una gastronomía interminable.
Una ruta por el norte perfecta es Asturias. Podrás estar de un lado para otro con el coche descubriendo rutas, pueblos y playas preciosas que harán del viaje interminable. Una ruta de una semana puede comenzar en el Parque Nacional Picos de Europa, pasando 3 días recorriendolo, empezando por la Ruta del Cares e incluyendo los Lagos de Covadonga. De camino a Cangas de Onís puedes saludar a la Virgen de Covadonga y su santuario. Después puedes ir a Arriondas a realizar la ruta en kayak más famosa del mundo: El Descenso del Sella, hasta Ribadesella. Desde la costa las opciones se multiplican pudiendo escoger entre ir al este con pueblos como Llanes y playas preciosas como la playa Ballota; o ir al oeste por la costa hasta Gijón, Avilés o Cudillero.
Sobre todo, no podrás irte de Asturias sin degustar un buen cachopo, unas fabes o unas patatas con cabrales.
Julio, Costa Brava
Últimamente se ha puesto de moda y es que las playas de la Costa Brava hacen que te teletransportes a una isla mediterránea. Si te animas a ir en coche a la Costa Brava podrás pasar una semana descubriendo pueblos pesqueros y calas escondidas refugiándote del calor veraniego.
Puedes empezar tu ruta en coche en Tossa del Mar, huyendo de la masificada Lloret del Mar, descubriendo sus playas de alrededor como Cala Pola o Futadera. De camino al norte por la costa puedes pararte en San Feliú de Guixols para darte un baño en Cala Rovira. Siguiendo hacia el norte debes parar en el pueblo de Llafranc, un pueblo pequeño rodeado de aguas azules y casas blancas con el faro de San Sebastián.
Y es que en esta costa encontrarás un sinfín de calas preciosas como I´lla Roja, Sa Caleta, Sa Boadella, Pedrosa, Marquesa o Estreta entre muchas otras más!!
Agosto, Rias Baixas
Santiago de Compostela
Galicia Calidade, si es que se define por sí misma. Una ruta de dos semanas recorriendo sus carreteras verdes, serpenteantes, bebiendo albariño y comiendo marisco… ¡vacaciones 10!
Te recomiendo que empieces por una gran ciudad como Santiago de Compostela, vayas a la plaza de Obradoiro y visites la Catedral y veas cómo llegan los peregrinos a su etapa final. De ahí coger el coche dirección Vilagarcía de Arousa, pasando por el pueblo de Padrón (unos pican y otros no), aquí verás una de las rías más grandes. Después puedes continuar por Cambados, la isla de O Grove y, si tienes tiempo, la isla de La Toja con sus famosas aguas termales. Continuas hasta Pontevedra descubriendo maravillas como la Basílica de Santa María la Mayor o el Monasterio de Santa María de Armenteira.
Islas Cíes
Yo te recomiendo que bajes hasta Nigrán, cruzando por el puente la ría de Vigo. Yo pasaría de largo de Vigo, opinión personal, ya que a mí no me gustó cuando estuve. Y disfrutes durante dos días de las islas Cíes, haciendo senderismo y bañándote en esas playas de arena fina. ¡Ojo! Cuidado con las gaviotas que se llevan cualquier cosa que esté a su alcance…
Como te he dicho al principio, en este recorrido no debe faltar los albariños, comer marisco y un buen pulpo a feira.
Septiembre, Cabo de Gata
Los Escullos
Como ves el sur de España nos tiene enamorados. Y no es para menos, hay cientos de rutas qué hacer por Andalucía y todas preciosas. Hace años hicimos esta ruta en coche durante una semaan por Cabo de Gata y nos sorprendió bastante. Si te gusta la playa esta es tu ruta. Vimos playas preciosas, entre ellas, la más bonita de España. Y la carretera discurre por la costa, ideal para llevar la música a todo volumen y cantar mirando al mar.
Nosotros pasamos una semana recorriendo el parque natural por la costa haciendo base en el pueblo Cabo de Gata. Empezamos de sur a norte pasando por las playas de Monsul, los Genoveses, la playa del Arco y los Escullos, el Playazo de Rodalquilar, cala de Enmedio y, finalmente, la playa de los Muertos; considerada durante años la mejor playa de España.
Playa de los Muertos
También en esta ruta pasamos por pueblos pesqueros muy cucos como la Isleta del Moro, donde os recomiendo comer en uno de sus restaurantes situados en el puerto sobre un acantilado; y el mirador de Cabo de Gata donde ver una preciosa puesta de sol sobre el Mar Mediterráneo.
Uno de los roadtrips por España que más hemos disfrutado y que mejor recuerdo tenemos.
Octubre, Mallorca
Caló des Moro
No nos podemos olvidar de las Islas tan fantásticas que tenemos en España. Todas ellas merecen una ruta en coche para descubrirlas a fondo. Vamos a empezar por la isla más grande que tenemos: Mallorca.
La verdad es que da para muchos viajes Mallorca. Tiene unas cuantas caras y se amolda a cualquier tipo de viaje. Solamente ir a Palma a pasar un fin de semana te deja con ganas de más.
Te voy a contar la ruta express que hice el año pasado en un fin de semana largo aunque, como digo da para mucho más. Esta ruta se centró en el sureste de la isla y puedes realizarla en una semana para aprovechar unas buenas vacaciones.
Es Pontás
Hicimos base en Cala Ferrera y desde ahí pudimos explorar calas preciosas como Caló des Moro, Llombards, Mondragó y, también, la playa de Es Trenc. Para ir a todas ellas, pasamos por pueblos pequeñitos, preciosos, anclados en el pasado, con un aire rural e isleño como Las Salinas o Es Llombards.
Si vais no os podéis perder también dos paisajes preciosos como son Es Pontás y Sa Cova Foradada. Ambos, unos arcos naturales situados en el mar únicos e imprescindibles de ver.
Noviembre, Selva de Irati
Selva de Irati
Es la época ideal para visitar el segundo hayedo más grande de Europa, por detrás de la Selva Negra de Alemania. Navarra tiene lugares preciosos para hacer un roadtrip muy salvaje por España.
Aunque nosotros fuimos solo un puente de tres días, nos hubiéramos quedado un mes descubriendo bosques y lagos preciosos en Navarra. Nuestra ruta se centraba en conocer la Selva de Irati y sus alrededores y no nos defraudó. A cada minuto nos parábamos en la carretera para poder disfrutar de lo enigmático del paisaje. Hicimos base en el pueblo peregrino de Zubiri. A medio camino entre Irati y Pamplona.
Para entrar en la Selva de Irati hay dos entradas: Orbaiceta y Ochagavía. Nosotros entramos por Orbaiceta y ya la carretera hasta llegar merece la pena. Te recomiendo que un día lo pases recorriendo la Selva de Irati alrededor del lago.
Real Fábrica de armas de Eugi
Otro sitio que no debes perderte en este roadtrip por España, es el parque del Quinto Real, tan bonito, o más, que la Selva. De camino a él pasarás por el pueblo de Eugi con su pantano. Y si continuas por la carretera verás la antigua Real fábrica de armas de Eugi abandonada y conquistada por la naturaleza. Si te decides hacer este roadtrip por el norte, no debes perderte Sorgain un valle que discurre por el río Erro, con un aire mágico donde podrás respirar paz y disfrutar de ir en el coche.
¡Ah! y no te olvides de parar en Pamplona y disfrutar de sus pinchos.
Diciembre, Lanzarote
La Graciosa
Las Islas Canarias son ideales para pasar unas vacaciones en diciembre. Una de las islas más completas de estas islas es Lanzarote. Si buscas un roadtrip por España con buen tiempo en diciembre, Lanzarote es tu destino. Si haces una ruta en coche por Lanzarote no olvides de visitar la isla de La Graciosa, todo un paraíso dentro de España.
Dentro de esta ruta que perfectamente puede durar una semana no puedes olvidarte de incluir una visita a la cueva de los Verdes o las diferentes obras de arquitectura y escultura de César Manrique; como por ejemplo, los Jameos del Agua o el Mirador del Rio.
Al estar en una isla, no puede faltar una visita a las playas de Lanzarote. Entre ellas, destaca la playa del Papagayo, un conjunto de playas a cual más bonita. También debes ir a la playa favorita para hacer windsurf, Famara; o una playa de arena negra, Playa Quemada.
Los Jameos del Agua
Todo viaje a Lanzarote no estaría completo sin una visita a Marte; es decir al Parque Nacional del Timanfaya. Esta visita guiada en un bus es como ir en un autobús espacial por tierras rojas, cráteres y totalmente desértico.
Por último, no puedes perderte la gastronomía tan maravillosa que tiene esta isla. Sus papas arrugadas, el mojo picón (verde y rojo), las lapas, el pescado fresco o el gofio son algunos de los platos típicos de la isla.
En los paquetes de agencias suele entrar un crucero de 4 días por el Nilo como forma de descubrir Egipto. Aunque suene un poco turistada, la verdad es que es una forma muy rápida, segura y eficaz de descubrir los grandes atractivos de este maravilloso país. Aunque seguramente, que hacer una ruta a tu aire también es muy buena opción. Aquí os mostramos los puntos más importantes de Egipto y las paradas que suelen hacer este tipo de cruceros por el Nilo.
Día 1 – Viaje
Como ya dije en el post ‘Preparativos del viaje a Egipto’ este viaje fue una sorpresa para mi chico, Sergio. No supo del destino hasta llegar a la puerta de embarque. Le encantó el destino elegido, ya que era uno de sus sueños desde niño ir a Egipto.
Nuestro primer día fue de transito; volamos en un vuelo chárter (un vuelo flotado por una compañía privada) lo que se traduce en retrasos en pista. Con casi dos horas de retraso, y tras 4 horas de vuelo, llegamos a Luxor ya entrada la noche. Allí nos recogieron varios autobuses y nos llevaron directamente al barco.
Solo dio tiempo a cenar y a repartir las habitaciones. Tras esto, fuimos a descansar y prepararnos para lo que teníamos por delante. ¡¡Empezaba nuestro crucero de 4 días por el Nilo!!
De madrugada partimos a nuestra primera parada de la orilla oriental de Luxor, el Templo de Karnak. De este templo solo queda una décima parte de lo que era y se comunicada por una avenida de esfinges con el Templo de Luxor; más de 3 km de distancia los separan.
Tiene una superficie de más de 2 km2 y tenía un embarcadero que llegaba hasta el rio Nilo. Es un complejo de templos y obeliscos a diferentes dioses, ya que la tradición dictaba que cada faraón debía contribuir con alguna ampliación al Templo de Karnak. De ahí su magnitud.
Lo que más sorprende de este templo es su sala hipóstila, o de columnas, magníficamente conservadas. Disfruta d ellos rayos de sol atravesándolas. Tomate todo el tiempo que puedas por el templo para disfrutar d ellos jeroglíficos y los obeliscos que se alzan al vuelo (algunos de ellos los habrás visto en otros museos de Europa).
Templo de Luxor
Nuestra siguiente visita fue el Templo de Luxor. Situado en el corazón de la ciudad de Luxor y a la orilla del rio Nilo. Fue ampliado por grandes figuras de Egipto: Ramsés II, Alejandro Magno o Tutankamón, entre otros. Aquí puedes descubrir las disposiciones clásicas de los templos egipcios, desde la parte pública hasta el santuario, donde solo accedía el sacerdote. Verás como va de más a menos todas las salas y con cierta inclinación hacia el cielo. Fíjate como disminuyen el número de columnas según vas adentrándote.
También en este templo verás las primeras representaciones de Alejandro Magno como egipcio y cómo los cristianos ‘modificaron’ el templo.
Finalizada esta interesante visita. Nos subimos a unas barcas en la orilla del Nilo y atravesamos el rio hasta la orilla occidental. Esta parte estaba considerada la parte de los muertos, a las afueras de la ciudad. En ella debían descansar los cuerpos de los reye, sus reinas y sus hijos.
Tras un paseo en bus, llegamos al Valle de los Reyes. Para llegar hasta él, se debe coger un mini tren, que te alivia del sofocante calor. Con la entrada puedes visitar tres tumbas a elegir, menos la de Tutankamón, que tiene un suplemento.
En el Valle aprendes cómo eran los ritos funerarios de los faraones, los esfuerzos monumentales que tenían que hacer para construir esas maravillosas tumbas bajo tierra, la magnitud de las mismas y toda la simbología que rodeaba a la muerte.
También descubrirás porqué Tutankamón, aún sin ser el más grande e importante de los faraones, lo ha llegado a ser con el paso del tiempo.
Nosotros nos hubiéramos quedado horas viendo todas las tumbas del Valle y escuchando historias interesantísimas de cada una de ellas.
Después de esta apasionante visita, nos dirigimos al Valle de las Reina, que está separado del anterior. Por el camino puedes ver las casas de los artesanos que a día de hoy viven ahí y cuidan las tumbas de los nobles a las afueras de los valles.
Valle de las Reinas
La tumba más importante del Valle de las Reinas es la Tumba de Hatshepsput. Un opulento edificio integrado en la ladera de la montaña. Está dividido en tres grandes terrazas que se conectan con una escalinata que parece llevarte al cielo. Destacar que, debido a conflictos familiares, no encontrarás el rostro de esta reina en ninguna parte. Fue mandado destruir, en señal de venganza.
En este templo encontrarás representaciones del cielo y la tierra pintados en el techo con colores originales. Algo que te acerca más a la época faraónica. Contemplad la inmensidad y la belleza de este templo que ha servido de inspiración.
NOTA: Llevaros mucha agua, protector solar y gorros, especialmente en esta tumba hace mucho calor.
Colosos de Memmón
Nuevamente en el bus nos dirigimos a nuestra última parada del día, los Colosos de Memmón. Dos impresionantes estatuas de 18 metros de alto de una sola pieza. Estos dos gigantes de rostro era solo una ‘pequeña’ parte de lo que fue el templo de Amenhotep III, del que apenas quedan restos. Se cree que este templo era más grande que el de Karnak. Situarte debajo de ellas es sentirte insignificante.
Después de esto, y siendo las 12.30 pm con un calor asfixiante, nos fuimos al barco para comer, descansar y disfrutar de la piscina en la cubierta. Parece un plan ‘snop’ pero navegar por el Nilo viendo el atardecer, es una sensación maravillosa y placentera.
Día 3 – Kom Ombo
Templo de Horus
En nuestro tercer día de nuestro crucero de 4 días por el Nilo, amanecimos en Edfu, rio Nilo arriba, y después de cargar pilas con el desayuno, nos subieron a unas calesas de caballo directos al Templo de Horus. Este templo dedicado al dios halcón es famoso por su estado de conservación impecable. ¿Por qué está tan bien conservado? Durante muchos años estuvo sepultado bajo arena y escombros, lo que permitió que llegara en estas condiciones hasta nuestros días.
Impresiona su fachada de 36 metros de alto con bajos relieves idénticos en cada lado de la fachada. Más adelante y siguiendo el patrón de todos los templos, podrás comprobar cómo este templo fue refugio de los primeros cristianos, los cuales picaron las caras de todos los dioses y, a causa de sus fuegos para resguardarse del frio, destrozaron los frescos de los techos.
Mi recomendación, perdeos por los pasillos, subid y bajad rampas y maravillaos de como traspasa la luz del sol a través de los huecos de este templo. Te impregnarás del misterio de los egipcios.
Templo de Kom Ombo
Terminada la visita, regresamos al barco para continuar el viaje hasta Kom Ombo. Aquí veríamos el atardecer en el Templo Kom Ombo. Este templo se sitúa a la orilla del rio Nilo, en un enclave donde solían haber muchos cocodrilos.
Este templo tiene muchas curiosidades que descubrir. Es el único doblemente consagrado: al dios cocodrilo, Sobek y al antiguo Horus, Haroeris. ¿En qué se nota esta doble consagración? El templo es simétrico respecto al eje vertical y tienen doblemente todo: dos entradas, dos salas de columnas y dos santuarios.
Aquí nos enseñaron el calendario egipcio, cómo escribían las cantidades y sus fórmulas, así como relieves que dejaban al descubierto todo el instrumental quirúrgico que utilizaban y que, hoy en día, se sigue utilizando.
En este templo también podréis visitar un pequeño museo con cocodrilos momificados, en perfecto estado, de la época de los faraones. Dentro, no dejaban hacer fotos.
Ya entrada la noche, volvimos al barco para cargar las pilas para el madrugón que se nos avecinaba.
Día 4 – Aswan
Pues sí, a eso de las 2am nos levantamos y con nuestra almohada bajo el brazo, nos subimos al bus para ir directamente a uno de los platos fuertes del viaje, Abu Simbel. Partimos desde Aswan, a donde llegamos después de estar toda la noche navegando.
Abu Simbel
A Abu Simbel se puede ir en avión o en bus, nosotros lo hicimos de la segunda forma y tras 3 horas de camino, vimos salir el sol sobre el Lago Nasser.
Este templo, en realidad, es el Templo de Ramsés II, aunque lleva el apodo de su descubridor. Una anécdota muy bonita de contar. Justo al lado se encuentra el Templo de Hator, dedicado a Nefertari, la mujer de Ramsés II. Estos dos templos se situaban 60 metros más al sur de su ubicación actual, pero debido a la construcción de la presa del lago, tuvieron que desplazar el templo piedra a piedra hasta su ubicación actual para no perder este templo tan extraordinario.
Lo que más nos impactó fue ver, en el santuario del templo de Ramsés II, la disposición en tronos de la triada divina junto a Ramsés, dispuestos de tal forma que el día que se conmemora el aniversario del nacimiento de Ramsés II y el día de su coronación, el sol se refleja directamente en la cara del faraón. Esto sucede el 21 de octubre y de febrero.
¿Os imagináis la obra de ingeniería que tuvo que ser desplazar primero todo el templo piedra a piedra, y posteriormente hacer coincidir este hecho con el día exacto? A mi me asombra. Según dicen hubo un fallo de cálculo y el fenómeno se ha retasado un día respecto al original (todo no iba a ser perfecto).
Finalizada la visita unas dos horas después cogimos de nuevo el bus y otras 3 horas de viaje hasta el barco.
¿Merece la pena 6 horas (ida y vuelta) de viaje para ir a ver Abu Simbel? Sí rotundo. Es un templo más, pero la localización y encontrarte con las cuatro estatuas de Ramsés II de 20 metros de altura, encontrarte las estatuas del interior, los jeroglíficos, el lago Nasser, etc. Completan esta excursión que vale mucho.
Aswan
Por la tarde, nos llevaron a dar un paseo en faluca, las embarcaciones a vela típicas del Nilo. Es un paseo pausado y calmado viendo cómo cae el sol sobre el desierto. Entre islas, parques de aves e historias antiguas, atracamos en la orilla occidental del Nilo donde nos pudimos dar un baño en el río. Está muy bien poderse bañar en el Nilo, sin cocodrilos, pero el agua está helada. Aunque haga mucho calor fuera tampoco apetece estar mucho dentro, pero tienes que probarlo.
Después de secarnos cogimos un camello para acercarnos al poblado nubio. Está concentración de casas son muy particulares. No tienen el carácter austero y cuadriculado que reina en Egipto. Son más bien casas con cúpulas y decoradas con pinturas muy alegres en las fachadas. Esto se traslada también a las calles, llenas de mercadillos para turistas muy coloridos.
Entramos a la casa de una familia nubia, que debe ser la más visitada y pudimos probar dulces típicos, aprender de sus costumbres y tocar a sus animales de compañía: los cocodrilos.
Ya cayendo la noche, volvimos a una barca para ir a la orilla oriental donde nos esperaban unas calesas para dar una vuelta nocturna por Aswan. Visitamos la iglesia ortodoxa, la mezquita de Aswan, bazares y las calles abarrotadas de la ciudad del sur de Egipto.
Este día acabamos agotados de tanta experiencia, pero mereció la pena, porque… En los viajes se va a vivir y no a dormir.
Día 5 – Aswan
Nuestro último día de crucero de 4 días por el Nilo iba a estar dedicado a ver el templo en el que está el último jeroglífico de la historia (dato poco conocido).
Templo de Filae
En la isla de Filae, se encuentra el templo del mismo nombre. Este templo tiene un aire de romanticismo por la historia que le rodea. Además, es especial ya que no sigue el patrón del resto de templos por cuestiones de espacio. Encontrarás la sala de columnas en un lado, el santuario en otro, no tendrás esa apariencia de ascensión al cielo, etc. Pero aún así, conserva su encanto.
Otro dato curioso, es que este templo estuvo a punto de perderse por la construcción de la nueva presa del lago Nasser. La Unesco pudo rescatarlo y trasladar este templo, piedra a piedra hasta la localización actual. De hecho, la isla original está bajo las aguas del lago.
A este templo solo se puede acceder en barca y puedes también obtener unas bonitas fotografías desde el agua. Merece la pena.
Ya terminada esta visita, nos llevaron a varias fabricas de algodones y esencias típicas de Aswan. A nuestro parecer “turistadas” que sobraban, pero deben hacer caja…
Se acababan nuestro crucero de 4 días por el Nilo, fue una experiencia maravillosa. Llenos de historias, dinastías, leyendas, culturas, religiones, ritos y maravillas del antiguo mundo. La experiencia de ir en un crucero es maravillosa. Tienes cultura y relax todo en uno. Nos hubiera gustado pasar mucho más tiempo en cada templo, pero había que cumplir con el itinerario antes de que apretara el calor del Egipto.
Todavía nos quedaba más viaje, 2 días en El Cairo con otra de las visitas más ansiadas del viaje, las Pirámides de Giza.
¿Qué os ha parecido el crucero de 4 días por el Nilo que hicimos? ¿Lo haríais?
Antes de enseñaros nuestra ruta de 9 días por Jordania que realizamos, quisiera contestar a una pregunta muy frecuente cuando nos planteamos un viaje como este…
¿Viaje por agencia o por libre a Jordania?
Vimos a grupos de españoles con agencia de viajes en Petray, sinceramente, me dio pena que no pudieran disfrutar de este sitio en todo su esplendor. Los vimos correr de un lado a otro y los guías se centraban en explicar la historia del lugar; pero no en disfrutar del espacio tan especial que es. Igual nos pasó en Betania, movidos como rebaño sin apreciar lo especial que era el lugar.
El Siq de Petra
Además, los jordanos son muy amables y te ayudan desinteresadamente en todo, a la mínima que te ven perdido se acercan y te intentan ayudar. Las carreteras están bien señalizadas, en inglés y con un GPS o con mapas descargados en tu móvil por Google Maps, llegas fácilmente a los sitios.
El coste de viajar por tu cuenta o por agencia será un poco más bajo y, encima, le sacarás mucho más partido a tu experiencia. No tengas miedo, no hay nada que temer.
Si no estás 100% seguro de hacerlo por tu cuenta, siempre puedes contratar un circuito de 8 días por Jordania.
Nuestra ruta de 9 días por Jordania fue…
Aunque estuvimos 9 días completos en Jordania, si hubiéramos estado dos días más hubiéramos visto algunas cosillas que nos dejamos en el tintero, como por ejemplo hacer barranquismo o senderismo en el Wadi Mujib. Pero con estos 9 días, vimos lo imprescindible de Jordania.
En cuanto a los alojamientos fuimos cambiando casi diariamente, siempre estando cerca de lo que haríamos ese día. Nos encontramos de todo tipo, algunos superaron nuestras expectativas y otros… mejor olvidarlos.
El inmeso Wadi Rum
Si quieres descubrir cómo fue nuestro día a día en Jordania aquí te dejamos el diario del viaje, detallado día por día para que no te pierdas nada en este fantástico país.
¿Qué os ha parecido nuestra ruta por Jordania? La verdad es que la disfrutamos un montón, descubrimos lugares increíbles y volveríamos a repetir esta ruta por Jordania sin pensarlo dos veces. Con esta ruta por coche te enamorarás del país del Lawrence de Arabia y de la amabilidad de los jordanos.