Cascada del Hervidero, dos cascadas en una ruta

Una de las cascadas más cercanas a Madrid es la Cascada del Hervidero, en San Agustín del Guadalix. Se encuentra a unos 30 km de Madrid en dirección Burgos por la A1. En menos de media hora estarás en una ruta corta, para hacerla en una mañana, adaptada para todas las edades que te dará la posibilidad de ver dos cascadas al precio de una. En este post te contamos lo necesario para disfrutar de esta ruta sencillita pero muy atractiva. 

Consejos

Como te hemos adelantado, esta ruta hacia la Cascada del Hervidero es muy sencilla, apenas tiene dos cuestas un poco empinadas que pueden salvarse si vas por otros caminos. Es apta tanto para hacerla con niños como con personas mayores, ya que los caminos están bien señalizados y discurren por caminos de tierra y asfaltados. 

Vistas a lo largo de la ruta

Para llegar a la Cascada del Hervidero debes bajar unas escaleras de hormigón y tiera bastante empinadas y sin protección alguna, pero si no puedes o quieres bajar por miedo, podrás también admirar desde lo alto del puente que hay justo antes de las escaleras. 

La ruta es de unos 4 km en línea pasando por las dos cascadas: la Becerra, a mitad de camino, y, como parada final, la del Hervidero. Es decir, que la ruta en total es de 8km, ida y vuelta; algo más si da una vuelta por la parte izquierda de la Cascada del Hervidero para verla desde arriba, esto es opcional, te lo contamos dentro de la ruta. 

A lo largo de toda la ruta te encontrarás con explanadas donde podrás descansar o montar un picnic con la familia y/o amigos. Además, cuenta con zonas de sol y sombra, pero te aconsejamos que si hace un día soleado vayas con protección solar, ya que la mitad del camino discurre sin sombras donde cobijarse. 

La ruta sigue el cauce del río Guadalix, por lo que no tiene pérdida, solo tienes que buscar el sonido del agua bajando para ir tanto a las cascadas como al punto de inicio. 

Río Guadalix

Por último, estás en el campo, por favor, llévate contigo la basura, puede que encuentres un contenedor de basura cerca de la Cascada del Hervidero, pero no siempre está, así que llévate una bolsa para recoger tus residuos y dejarlos en el punto de partida de la ruta.  

¿Cuándo es la mejor época para ir a la Cascada del Hervidero? 

La mejor época es el deshielo, a comienzos de la primavera para ver las cascadas con un gran cauce, pero si tanto vas en invierno o en verano siempre las verás con agua, no se seca apenas en todo el año, así que no tendrás problemas en cuanto a cuándo ir.

¿Cómo llegar?

Si vas en coche, lo mejor es que dejes el coche en esta ubicación. Aquí encontrarás sitio casi siempre. En los fines de semana puede costar un poco aparcar, pero en el polígono industrial, en calles paralelas, verás algún hueco para dejar el coche. Desde este punto verás un pequeño parque y el río Guadalix, solo tendrás que seguir el río arriba para comenzar la ruta. 

Punto de partida de la ruta

Si vas en transporte público, puedes coger desde el Intercambiador de Plaza de Castilla el bus número 193 y bajarte en la parada “Polígono Industrial Norte”. Desde aquí verás el supermercado Día y a mano izquierda el parque desde donde parte la ruta. 

Ruta

Como ya hemos hablado, la ruta parte del parque o zona de picnic que hay en el polígono industrial norte, desde aquí verás el río Guadalix que en este tramo queda a la izquierda y tendrás que ir subiendo hasta encontrar un puente de madera por el que deberás cruzar. 

Zona de picnic o punto de aparcamiento

Una vez cruzado el puente de madera verás una senda de tierra bien marcada y comenzarás a ver explanadas de césped para poder pararte siempre que quieras. Te recomiendo que, siempre que puedas, te acerques al río Guadalix y veas como baja el río.

Ruta paralela al Río Guadalix

¡Ojo! no está permitido el baño tanto en el río como en las cascadas, por lo que si hace calor, no te sientas tentado a meter los pies en remojo. Mejor busca una sombra y bébete ese refresco que trajiste de casa. 

Cascada Becerra

Para ir a la Cascada Becerra, que queda a mitad de camino entre San Agustín del Guadalix y la Cascada del Hervidero, nuestro punto final, deberás coger siempre los caminos de la derecha en todas las bifurcaciones que te encuentres. Irás lo más paralelo al río Guadalix. 

Río Guadalix

Antes de que te des cuenta, en este paseo tan relajado y tranquilo, sin esfuerzo alguno te verás bajando pequeñas pendientes hasta encontrarte con varias rocas de granito donde te encontrarás detrás de ellas la Cascada Becerra. Este pequeño salto de agua que prácticamente puedes llegar a tocar, de lo cercano que se encuentra desde la orilla. 

Cascada Becerra

Una vez admirado este pequeño salto puedes continuar hasta la Cascada del Hervidero por el mismo sendero. Llegarás a un punto donde se corta el camino pero a tu izquierda encontrarás unas pequeñas escaleras excavadas en la arena. Si te cuesta subir estas escaleras, puedes volver sobre tus pasos hasta el último cruce de tierra y continuar por los caminos. Desandarás como mucho unos 100 metros. 

Cascada del Hervidero

Una vez en el sendero principal de tierra tendrás que seguir hacia la derecha. Llegarás a una pista de asfalto, en este cruce gira a la derecha, cuesta abajo. Al final del camino cruzarás un puente que te lleva hasta la otra orilla del río Guadalix. Pasado este puente el camino gira a la izquierda, cuesta arriba. 

Puente hacia la cascada

Sigue este camino de tierra de nuevo, pasado unos 20 metros verás un caminito a la izquierda en una casita de granito, no lo cojas, sigue ascendiendo un poco más hasta una baliza de paso blanca y roja. En este punto pasa esa baliza y verás un camino a la derecha, desde aquí volverás a escuchar el río e irás en paralelo de nuevo hasta la Cascada del Hervidero. 

Baliza por la que debes pasar

En este paseo hasta la cascada irás flanqueado por una naturaleza cambiante a lo largo del año, puedes encontrarte encinas, pinos, jaras, lavanda, etc. un festival de colores y olores diferentes dependiendo de la estación en la que vayas. 

Sabrás que habrás llegado a la Cascada del Hervidero cuando veas un puente de piedra, casi como un acueducto con una cadena que impide el cruce. Un poco más adelante, el camino de arena se acaba y verás unas escaleras de tierra y piedra que descienden hasta la cascada. 

Puente de piedra

Ten cuidado, estas escaleras son muy estrechas y empinadas. Si hay mucha gente deberéis hacer turno de subida y bajada, ya que dos personas no entran en la escalera. Además, no tiene pasamanos y da un poco de vértigo ver la caída que hay hasta abajo. 

Escaleras de bajada a la cascada

Una vez abajo, tendrás ante ti la Cascada del Hervidero. Antiguamente, podías bañarte en esta cascada, pero ahora está prohibido. Disfruta del sonido del agua y del salto tan bonito que es la Cascada del Hervidero. 

Cascada del Hervidero vista desde abajo

Una vez acabada la ruta, vuelve sobre tus pasos para acabar con esta visita a la Cascada del Hervidero. Volverás al punto de partida habiendo visto dos preciosas cascadas a un paso de Madrid. 

Otras vistas 

Si no quieres bajar las escaleras porque haya mucha gente, eres mayor, vas con bebés o tienes vértigo, en el mismo puente de piedra con una cadena, puedes ver la cascada desde arriba. Estará tapada con algún árbol que otro, pero podrás verla perfectamente. 

Cascada desde el puente de piedra

Otra vista de la Cascada del Hervidero está en su parte más alta, el empiece. Para ello, una vez subas las escaleras, puedes cruzar andando el puente de piedra. Desde ahí sale un pequeño sendero, donde apenas cabe una persona, que te llevará a la parte más alta de la cascada. 

Vista de la cascada desde su empiece

Ten cuidado si la tierra está mojada, ya que puede resbalar.  Igualmente, cuando llegues al empiece de la cascada, ten cuidado con el granito, ya que puede resbalar y puede causar un accidente. Si vas con niños, no les dejes sueltos para evitar problemas. 

Mapa

Dónde comer 

Si no quieres hacer picnic y quieres darte un homenaje al terminar esta ruta. Puedes ir a comer a alguno de los buenos restaurantes que tiene San Agustín del Guadalix. Bares y restaurantes tienes muchos, pero uno de los más famosos es el Caserón de Araceli. 

Un restaurante de comida castellana, en el que es necesario hacer reserva y donde podrás disfrutar de una carne excelente de la Sierra de Guadarrama. Eso sí, prepara el bolsillo ya que el precio medio oscila entre 30-35€ por persona. Un broche redondo para esta ruta de cascadas cerca de Madrid.

Un día en la Selva del Irati

El segundo hayedo más grande de Europa es todo un espectáculo de la naturaleza en cualquier época del año. Aunque su máximo esplendor lo tiene en otoño, cuando se produce el cambio de hoja y toda la Selva se tiñe de color. Merece, al menos, pasar un día en la Selva de Irati para enamorarte del otoño y la tranquilidad de este lugar.

Musgo y hayas son los habitantes de Irati

Si te escapas un fin de semana a Navarra, no desperdicies la oportunidad de conocer la Selva del Irati, así como otras zonas tan bonitas con Quinto Real o la Real Fábrica de armas de Eugi o Sorogain.  

¿Cómo llegar a la Selva del Irati?

Para llegar a la Selva de Irati puedes hacerlo de dos formas. Existen dos entradas a la Selva, una está en Orbaizeta y la otra en Ochagavía. Ambas entradas cuentan con parking tanto para caravanas como para coche. 

Rutas con encanto
Jugando con las hojas

Existen varias tarifas para poder acceder al parking de la Selva del Irati que van desde 1€ por moto hasta 5€ por coche. No hace falta reservar plaza de aparcamiento como pasa en otros hayedos, pero sí que te recomiendo que llegues pronto. 

Por dos razones: disfrutar de la soledad del parque hasta que lleguen grupos varios y la otra razón es porque, al menos en la entrada de Orbaizeta, existe un parking superior que te lleva hasta la Presa del Embalse de Irabia, que tiene plazas limitadas. Este parking te deja unos 3 km más adentro de la Selva y desde este parking salen más rutas. Por no decir, que la carretera es preciosa. 

¿Qué llevar?

Dependerá mucho de la época en la que vayas, por supuesto, pero no te olvides nunca de llevar siempre contigo para pasar un día en la Selva del Irati: 

Las telas de araña hacen magia
  • Calzado y ropa cómoda: a poder ser siempre botas de montaña o senderismo, puedes ir en deportivas, pero es un sitio especialmente húmedo y cuando las hojas se han caído puede provocar resbalones y algún susto. Así que lleva calzado que agarre bien. En cuanto a la ropa, mejor que sea impermeable, por lo menos un chubasquero y que abrigue, que estamos en los Pirineos. 
  • Comida: la ruta que elijas por pequeña que sea te llevará más tiempo del normal. ¿Por qué? porque estás dentro de un bosque casi mágico, hará que se te pasen las horas volando y no pararás de hacer fotos a cada rincón, porque todo es precioso. Así que llévate comida para hacer un picnic y frutos secos por si te apetece picar algo. 
  • Una pequeña bolsa: para llevarte todo lo que has traído contigo, es decir, la basura. No hay cubos de basura en toda la Selva, por lo que te tendrás que llevar hasta el parking todos tus residuos. 

Rutas de la Selva del Irati

Existen hasta 16 rutas señalizadas para pasar varios días en la Selva del Irati, existen dos tipos de rutas: las rutas del valle Aezkoa, que se entra por Orbaizeta y las del valle de Salazar, que se llega por la entrada de Ochagavía. 

Mires a donde mires es un espectáculo de color

Hay rutas para todos los gustos y todas las edades, pueden hacer estos senderos desde niños o expertos senderistas. En algunos de ellos hay pistas por las que puede ir un carrito de bebe, pero si vas con pequeños, será más cómodo que vayas con un portabebés. 

En ambas entradas hay un puesto de información donde puedes preguntar por la ruta más adecuada para el tiempo y el tipo de senderistas que seáis, os darán un mapa gratis y os indicarán el empiece de la senda. 

Rutas paralela al embalse

Si solo tienes un día para disfrutarla, te recomendamos que hagas la ruta que da la vuelta al embalse de Irabia. Nosotros realizamos esta ruta y disfrutamos de varios atractivos de la Selva, desde sus profundidades, repletas de musgo, rocas y hayas rojas, el embalse con una luz preciosa (aunque a la mitad), puentes medievales y miradores con unas panorámicas envidiables. Todo un espectáculo lleno de color y silencio solo interrumpido por las hojas cayendo a nuestro paso. 

Nuestra ruta

Caminos para todos los gustos

Nuestra ruta de un día en la Selva del Irati comenzó en el parking de la presa de Irabia, por la entrada de Orbaizeta, llegamos pronto y pudimos subir hasta el parking 3 que te deja en la misma presa. 

Si cruzas el puente de la presa ahí comienza las indicaciones de la senda SL-NA-50C llamada Plaza Beunza. Esta ruta es circular y dura 5 km, lo que hicimos para continuarla alrededor del embalse, fue seguir la senda paralela al embalse, ya que esta ruta gira a la derecha y se aleja para volver al punto de inicio. 

El embalse de Irabia casi seco

No te preocupes, no te perderás ya que está todo señalizado y hay caminos por todos lados. Si sigues recto, llegarás a la parte más estrecha del embalse y verás un puente para cruzar de lado y hacer la ruta de vuelta. 

Una vez que cruces y vayas de vuelta te incorporarás a la senda SL-NA-54C, llamada Los Paraísos-Erlan, puedes coger y seguir esta ruta para hacer un par de kilómetros más o puedes ir en dirección contraria a las flechas y llegarás al parking, siempre bordeando el embalse. 

Adentrándonos en Irati

Esta ruta nos llevó un día entero por la Selva del Irati, parando a comer y paseando de forma relajada, tomando fotos y descansando para contemplar las vistas. En total fueron unas 6 o 7 horas recorriendo unos 13 km de recorrido. 

¿Qué ver en los alrededores de la Selva del Irati?

Si tienes pensado pasar más de un día por los alrededores de la Selva del Irati puedes realizar diversas actividades como visitar otros paisajes naturales, cruzar la frontera o visitar la cuna de los encierros. 

Valle de Sorogain

Otros entornos naturales de la zona que no puedes perderte es el parque del Quinto Real, un hayedo con un aspecto de bosque encantado que tiene varias rutas de senderismo para disfrutar del entorno. Dentro del parque de Quinto Real tienes la Real Fábrica de armas de Eugi, ahora abandonada y poblada por la naturaleza, todo un espectáculo. 

Otro entorno natural que no puede faltar en tu viaje a la Selva de Irati es el valle de Sorogain. Este valle no puede ser más verde, aquí podrás pasear entre vacas y caballos pastando a lo largo de los senderos. Una combinación de colores perfecta que se culmina con el agua celeste del río que discurre por el valle. 

Real Fábrica de armas de Eugi

Si en cambio quieres visitar algo más urbano, tienes que ir a Pamplona, su casco histórico está lleno de plazas y calles que las reconocerás de la televisión. No puedes pasar por alto el entrar a la Catedral de Pamplona, es gratuita, y ver su columbario, un cementerio que se ubica en el claustro de la Catedral que enmarca un patio precioso, como si de una joya oculta se tratara. ¡Ah! y disfruta de sus pintxos en sus bares y tabernas, no te arrepentirás. 

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